El Salón de Bolonia nos está dejando los últimos retoques en las gamas de las firmas italianas, pero si una se merece especial atención es la de Abarth. Si al otro lado del Atlántico comenzaba su desembarco con un sugerente anuncio y una motorización Multiair de 160 caballos, para Europa ha presentado una nueva gama compuesta por el Abarth 595 Turismo y Competizione, el Punto Abarth Scorpione y el último en incorporarse: El Abarth 695 Asseto Corse.
Como veíamos en los últimos días, las temporadas de motorsport acaban o ya han acabado y antes de que las navidades se echen encima y tras ellas los preparativos de cara a la temporada 2012, es un buen momento para elegir montura. Ya hemos conocido la propuesta de Audi con el LMS, a Porsche con el RSR y a Suzuki con el Swift Sport de la copa, pero hoy toca el turno de conocer la propuesta de Abarth.
El Abarth 695 Asseto Corse es la respuesta del escorpión para los circuitos
Listo para competir en el trofeo específico de Abarth o en otros campeonatos, el nuevo Abarth 695 Asseto Corse llega para sustituir al 500 Asseto Corse actual con unas cuantas mejoras mecánicas tanto en su motor como en otros puntos de su parte ciclo suponiendo además la continuación de la saga 695 iniciada por el Tributo Ferrari.
En la versión de competición, el motor turbo de de 1.368 centímetros cúbicos se exprime hasta cerca de los 210 caballos. Su carrocería se adereza con todos los elementos necesarios para entrar al circuito, incluido un alerón para asegurar la carga aerodinámica. Su interior también se transforma dejando ligeros atisbos del modelo de calle para dar paso a un interior aligerado y con las barras antivuelco correspondientes.
El modelo se equipa con llantas de 17 pulgadas de aleación, antesala de los discos de freno flotantes y perforados que hay tras ella, pero además del incremento de potencia de su motor en comparación con el modelo anterior, se ha añadido una caja de cambios secuencial específica.
Además de estos elementos el Asseto Corse es 30 kg más ligero que la versión anterior teniendo como especial protagonista de esta reducción al plástico Lexan que sustituyen las ventanas de este 500. Un paso más allá en la gama del pequeño escorpión que deja claras sus intenciones y que inevitablemente nos recuerda a aquella época donde los motores Abarth rugían en los circuitos y tramos de toda Europa.
Fuente: Fiat
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