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¿Será capaz Tesla de hacer frente a la Ford F-150 en su propio terreno?

Tesla Motors continúa su aparentemente imparable evolución. A pesar de varios incendios y una pequeña debacle en bolsa, el fabricante californiano vende más Model S que nunca y continúa su hoja de ruta. El siguiente modelo en ver la luz será el Model X – un SUV premium 100% eléctrico – tras el que vendrá la verdadera revolución. Un Model C – nombre provisional – que será una berlina compacta de coste asequible. Pensad en un Audi A3 Sedán 100% eléctrico con más de 300 km de autonomía. Tesla va a conseguir grandes éxitos.

En una ronda de preguntas y respuestas posterior a una conferencia del conocido medio Business Insider, Elon Musk – CEO de Tesla y una de las personas más influyentes de los últimos tiempos – ha admitido que su empresa no descarta lanzar un competidor para el Ford F-150. Así es, una pick-up de gran tamaño, que es además el vehículo más vendido en Estados Unidos, con diferencia. Musk decía que si las Ford F-150 son el vehículo más popular de EE.UU., Tesla Motors tendrá que lanzar un competidor digno.

Tesla Model S

El camino al éxito está lleno de obstáculos

En lo que va de año 2013 Ford ha vendido más de 560.000 unidades de la F-150 en EE.UU. – comparar las cifras con el mercado español es una futilidad – y Tesla apenas ha vendido 14.000 unidades de su Model S. Tesla aún es una empresa nueva en el mercado automovilístico, por lo que el lanzamiento de una pick-up Tesla – ¿Model F? – no ocurriría hasta al menos dentro de 5 años. Tesla aún necesita dar el paso a un verdadero mercado de masas y amasar más capital, algo que sucederá con el Model C compacto.

Una pick-up sería un verdadero reto para Tesla, en muchos sentidos. En primer lugar, porque una pick-up debe trabajar en los entornos más complicados y duros del planeta, en los que la mecánica, baterías y motores se ponen a prueba. Lugares lejos de cualquier punto de recarga, incluso de la red Supercharger. Otro reto es el asociado al gran peso y tamaño de una pick-up, que requeriría de una batería con un tamaño y un precio acorde. Otro reto es que el coste debe ser relativamente contenido si esta hipotética máquina quiere venderse a flotas.

Tesla

Y por último, un escollo inmaterial: el consumidor medio de pick-ups estadounidense. Es muy difícil disociar el concepto pick-up de los motores de ocho cilindros y alto rendimiento. O como poco de motores de seis cilindros y potencias superiores a 300 CV. Tesla ha conseguido “amaestrar” a los compradores del Model S, para que lo vean como un reemplazo de una berlina deportiva tradicional. No obstante, el comprador tipo de una pick-up puede ser más difícil de “amaestrar”.

Retos de un futuro que aún está por ver. Hasta ahora Tesla no ha defraudado, pero el paso de una empresa de nicho a un fabricante de masas está lleno de retos.

Fuente: Autoblog | CNN Money
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