El inminente Salón del Automóvil de Ginebra podría convertirse en el escenario donde se presente de forma oficial la integración de iOS in the Car, la apuesta de Apple para la integración de su ecosistema y dispositivos en los sistemas de infoentretenimiento del automóvil.
Las quinielas señalan a Ferrari, Mercedes y Volvo como las firmas que podrían acompañar a Apple en la presentación de iOS in the Car en Ginebra, una apuesta que serviría para ofrecer una imagen de fortaleza frente a la escalada que ha protagonizado Android en los últimos tiempos con la creación de la Open Automotive Alliance con firmas como Audi, General Motors, Hyundai y Honda respaldando la fórmula de Google.
Infoentretenimiento: el nuevo gran negocio del automóvil
La batalla está servida, y es que Apple y Google pretenden luchar muy duro en este nuevo y suculento mercado que es el automóvil, un mercado que habla de miles y miles de millones de euros y que supondría un golpe de efecto para el ganador que contaría para sí con una cartera de clientes de proporciones estratosféricas.
A priori se puede decir que la afrenta entre Apple y Google destapará al cliente final, el comprador y usuario del vehículo, como el mayor beneficiado gracias a un apuesta independiente por parte de cada gigante tecnológico para evolucionar y mejorar los servicios tal y como sucede en las plataformas móviles. Pero claro, esto habría que decirlo con muchas, muchas, muchas comillas.
La problemática no es otra que la implicación de estructuras y colaboraciones paralelas a nivel de hardware y software, un hecho que está posicionando a ambos bandos en un punto de no retorno. Un tema harto controvertido donde cada fabricante ofrecerá un catalogo inmenso de posibilidades para una determinado sistema operativo, pero que poco o nada ofrecerá si smartphone y coche no comparten dicho sistema.
El infoentretenimiento gana interés en el mundo del automóvil con cada nuevo anuncio realizado, haciéndose un hueco muy importante entre las preferencias a la hora de tomar una decisión de compra.
Así, lo que parece estar visto para sentencia es la idea de sistemas cerrados para cada fabricante automovilístico como se ha venido haciendo hasta la fecha. El software Open Source es el camino a seguir con el respaldo de una gran comunidad de desarrolladores, y ahí es donde reside la verdadera clave para decantar la balanza de uno u otro lado.
Fuente: Financial Times
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