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El Yamaha MOTIV se construirá en Europa y su blanco a derribar es el smart fortwo

Sería sencillo ver a Yamaha como un simple constructor de motocicletas, pero es una de las empresas más interesantes de Japón. Además de una completa gama de instrumentos musicales, fabrican motos, motos de nieve, equipamiento de generación de energía y motores para coches, entre otras cosas. Incluso llegaron a fabricar los Toyota 2000GT bajo encargo de la empresa de Osaka. En 2013 presentaron el Yamaha MOTIV, un urbano biplaza que se acaba de confirmar que construirán en Europa, posiblemente para todos los mercados mundiales. Todo ocurrirá en 2019, con una fábrica dedicada de la que aún se desconoce su localización.

Un coche simple y barato inspirado en el mundo de la moto

Su puesto de conducción es minimalista y muy enfocado a la conducción, una aproximación similar a la de una moto.

El Yamaha MOTIV será construido con la ingeniería de Gordon Murray, el que fuera ingeniero jefe del proyecto del McLaren F1. El señor Murray ha patentado un nuevo método de construcción de coches de pequeño tamaño, que ya nos demostró con los T.25 y T.27: un esqueleto tubular sobre el que se montan paneles de materiales compuestos como el plástico reforzado con fibra de carbono. Este método de construcción sencillo, asequible y muy ligero – bautizado como iStream – será empleando en el MOTIV de producción, un urbano biplaza que tiene al smart fortwo en su punto de mira, con la ligereza y un coste más asequible como objetivos principales.

El Yamaha MOTIV medirá sólamente 2,69 metros de largo, cifras en las que el smart fortwo de primera generación se movía, con su segunda y tercera generación ya en los 3 metros. Se ofrecerá en dos sabores: gasolina y eléctrico, como si de una moto scooter se tratase. Ambos son muy interesantes, pero presiento que el gasolina será el más vendido: equipa un nuevo tricilíndrico de un litro con entre 70 y 80 CV de potencia, pasando toda su potencia al eje trasero mediante una caja de cambios de doble embrague de seis relaciones. Promete consumos muy bajos y un 0 a 100 km/h de menos de 10 segundos, gracias a un peso de menos de 700 kg.

Su versión eléctrica se llama MOTIV.e, y estará equipada con un motor eléctrico de 25 kW de potencia máxima – ¡y picos de hasta 896 Nm de par motor! – con el que podrá recorrer unos 160 km en un ciclo de conducción real. Con un peso muy bajo y una batería de 7,2 kWh de capacidad, el Yamaha MOTIV.e parece el eléctrico urbano perfecto. Ambos vehículos serán construidos en una fábrica cuya ubicación aún se desconoce, de la que empezarán a salir los vehículos a partir del próximo año 2019. Una ventaja de Yamaha es que podrá aprovechar su extensa red de distribución europea, con concesionarios en un enorme número de ciudades.

Estoy seguro de que en Yamaha construirán un producto de calidad, pero habrá que ver si consiguen producir este vehículo a un coste competitivo – desde luego la sencillez parece su lema – porque el mercado no perdona en el segmento urbano. Tras Europa, donde Yamaha probaría el funcionamiento de su vehículo a nivel comercial, el gigante nipón podría lanzar el producto en mercados asiáticos. Por el momento, no parece que el MOTIV vaya a cruzar el charco, por lo que el continente americano podría quedarse sin este urbano biplaza. Estaremos atentos a los acontecimientos relacionados con este interesante coche.

Fuente: Carscoops
En Diariomotor: Gordon Murray consigue llevar adelante la fabricación de sus T.25 y T.27 | Yamaha MOTIV.e

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