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El nuevo crossover premium Cadillac XT5, espiado sin camuflaje en Manhattan

GM renovará muy pronto su oferta de crossovers con el nuevo Cadillac XT5. Se trata de un crossover de tamaño medio que reemplaza al ya veterano SRX, por el que los años han pasado de forma soprendentemente dura. Una unidad sin apenas camuflaje ha sido espiada en Manhattan, en una de las calles más turísticas del barrio de SoHo. Estaba claro que iba a terminar en internet, pero esta filtración demuestra que realmente Cadillac no tenía motivos para esconderlo. Su presentación al público podría ser inminente.

Todo lo que sabemos del nuevo Cadillac XT5

Su nueva plataforma estaría preparada para motores híbridos enchufables o 100% eléctricos. Veremos.

Y sin embargo, es un vehículo bastante más importante de lo que parece. Según fuentes como GM Authority reportan, el crossover estrenaría una nueva plataforma, que máquinas como el Buick Enclave o el Chevrolet Traverse heredarán en sus nuevas generaciones, pendientes desde hace ya tiempo. Esta plataforma estará preparada desde el principio para albergar mecánicas tanto convencionales como alternativas. De hecho, ya se habla del lanzamiento de un Cadillac XT5 con mecánica híbrida y una posible versión 100% eléctrica.

A nivel de diseño, el coche se inspira de forma clara en la actual oferta de Cadillac. No podemos negar el aire de familia con los lujosos CT6 o el arrollador SUV Escalade. Una calandra de aspecto firme es la protagonista de un frontal cuyas ópticas alargadas y verticales se extienden hacia atrás, como llevadas por el viento. La característica firma lumínica vertical sigue intacta. En perfil lateral mantiene una cintura muy alta, claramente ascendente, que a buen seguro penalizará su visibilidad desde dentro.

En su lanzamiento será una máquina convencional, evolucionaria. Los experimentos, con gaseosa.

En la zaga nos encontramos con una pareja de ópticas LED en forma de boomerang, que emanan de los nervios laterales. Dos escapes elegantes asoman por la parte baja del paragolpes, en una trasera muy elegante. Lo que sorprende en parte es que Cadillac siga fabricando un crossover convencional en todos los aspectos posibles: no se habla de motores turboalimentados o tecnologías revolucionarias por el momento. Quizá sea uno de los últimos crossover convencionales en el sentido habitual de la palabra.

Se espera que la gama esté articulada en torno al conocido 3.6 V6 de inyección directa, ya estrenado en el Camaro, con 335 CV de potencia. Hay dudas sobre el uso de motores turbo de cuatro cilindros en un nicho de mercado muy tradicional, y se descarta el lanzamiento de versiones deportivas, no es el estilo de Cadillac en el segmento.

Fuente: Jalopnik
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