ESPACIOS
Cerrar CERRAR
Entrada

3 MIN

Sin el Maserati Boomerang los setenta no habrían sido lo mismo

Bonhams pronto pondrá a la venta un Maserati Boomerang. Se trata de un prototipo único creado por Giugiaro en 1971. Su aspecto afilado en forma de cuña – en inglés el término se llama wedge, posiblemente lo hayáis escuchado alguna vez – marcó a varias generaciones de superdeportivos, y los trazos maestros de Giugiaro aún son visibles en algunos superdeportivos actuales. Ahora tú también puedes ser el dueño de una joya con ruedas que será subastada por Bonhams por un precio que se espera supere los cuatro millones de dólares.

Fue presentado como prototipo funcional en el Salón de Ginebra del año 1972.

Quizá el triunfo de Giugiaro haya sido conseguir que el coche aún parezca futurista. En una época en la que un coche medio en Europa era el Fiat 127, imaginad la comparación con esta máquina de aspecto espacial. No me entra en la cabeza. Extremadamente bajo, apenas levantaba un metro del suelo y su frontal podría cortar la pierna a un peatón en caso de atropello.

Pero en los setenta sólo se pensaba en que su forma aerodinámica supondría el futuro del diseño. Y lo cierto es que Giugiaro no se equivocaba. El espacio para los pasajeros es aéreo, rodeado de una enorme superficie acristalada, también presente en las puertas del coche. El techo era acristalado, y advertid el gigantesco tamaño del parabrisas. Pero más impresionante era su interior.

Giugiaro se inspiró en el Boomerang para diseñar los Golf Mk1, el Lotus Esprit o el Lancia Delta

Dejando a un lado el hecho de que los ocupantes tendrían que ir casi tumbados sobre los asientos, fijaos en el salpicadero. Todos los controles e instrumentación están ubicados en el interior del volante: habría que pasar la mano por dentro para accionarlos. Un despropósito en general para la ergonomía, pero una solución que aún hoy en día sigue captando nuestra atención.

Citroën empleó alguna de estas ideas «ergonómicas» en modelos de los años 80 – como el CX – pero por desgracia, han recuperado la cordura últimamente. Giugiario pretendía también dejar hueco para un airbag con su gigantesco volante y módulo de instrumentación. La zaga era algo más convencional, cuajada de líneas rectas con un curioso detalle: escapes rectangulares, décadas antes de su popularización.

Realmente, el coche parece haber sido diseñado sólo con escuadra y cartabón. La idea de Giugiaro era emplear las menos curvas posibles. Incluso las ruedas tienen un diseño anguloso. El coche que se subasta es la versión plenamente funcional del prototipo, construida sobre el chasis de un Maserati Bora y con un V8 de 300 CV en posición central.

Se decía que era capaz de alcanzar los 300 km/h, pero no me gustaría comprobar la velocidad punta de un prototipo artesanal construido hace 44 años en Italia.

Fuente: Carscoops
En Diariomotor: A subasta la colección de Don Car-Leone, el traficante de drogas más petrolhead de Londres | A subasta el Bentley T1 Coupe Speciale: el Rolls – Royce Camargue que pudo ser

Cargando...