ESPACIOS
Cerrar CERRAR

Prueba Abarth 124 Spider y 595 Competizione en el circuito de Navarra: ¡Envenenados!

Sí, podemos resumir toda esta experiencia con una inmensa sonrisa en nuestros rostros. El plan del día no podía pintar mejor, y es que Abarth nos había preparado una jornada repleta de caballos y curvas para que el veneno del famoso escorpión calase hondo en nuestras venas. A un lado la última generación del Abarth 595 Competizione, y frente a él el todavía más espectacular Abarth 124 Spider. Ambos modelos ya los hemos probado en Diariomotor, pero hoy los exprimimos en circuito para sacarles el 120% y firmar una experiencia que crea adicción.

El Abarth 124 Spider es el tercer modelo fruto de la colaboración entre FCA y Mazda

Abarth está dispuesta a protagonizar una nueva edad de oro, no sólo como preparador oficial de Fiat, sino desarrollando su propia estrategia que habla de un interesante catálogo de modelos, de implicación en competición con el 124 Spider R-GT y de una recuperación de su historia para llevarla hasta nuestros días y hacer valer todo ese pasado histórico repleto de leyendas. Abarth ha renacido con fuerza y el 124 Spider es quizás la mejor prueba de lo que está por venir.

Con motivo de la celebración del Abarth Day 2016 en el Circuito de Navarra, el fabricante italiano nos propuso una jornada donde poder dar rienda suelta a sus más recientes novedades. Ante nosotros un plan que combinaba varias vueltas en pista con el Abarth 595 Competizione, un circuito tipo «Mickey Mouse» con los Abarth 595 Turismo y el colofón final con la prueba del Abarth 124 Spider de nuevo en pista. Además, la organización nos brindó la posibilidad de recorrer algunas de las mejores carreteras navarras con ambos modelos, por lo que al final del día habíamos acumulado un buen puñado de kilómetros y cierta insolación en nuestras cabezas… mereció la pena para conocer hasta el último tornillo de la gama Abarth.

Pasaré más de puntillas sobre el Abarth 595 Competizione ya que mi compañero Sergio Álvarez tuvo la oportunidad de disfrutar de este modelo durante varios días, dando como resultado una prueba en profundidad del Abarth 595 Competizione y una análisis detallado de qué ha cambiado en la nueva generación del Abarth 595. En circuito el Abarth 595 Competizione nos demostró un talante muy racing, convirtiéndose en una grata sorpresa para mí al encontrar un coche muy bien puesto a punto donde frenos, grupo de transmisión (versiones con autoblocante) y suspensiones brillaron por encima del resto del conjunto demostraron un nivel muy alto. Esta pequeña hormiga atómica engaña a primera vista, pero tras exigirle todo y más, no solo no desfallece sino que muestra grandes capacidades para afrontar condiciones tan exigentes como las de un circuito.

Ya no se hacen deportivos así: tracción trasera, menos de 1.100 Kg, 170 CV y biplaza roadster…

Dicho esto, nos centraremos en la nueva estrella protagonista de la familia Abarth, el 124 Spider. La colaboración italo-japonesa no podía haber culminado de mejor forma que encontrándonos a 3 deportivos con 3 personalidades muy diferenciadas. Mazda MX-5, Fiat 124 Spider y Abarth 124 Spider son lo mismo… pero son completamente distintos entre sí. Cada deportivo ha tomado un camino para definir la deportividad, siendo el Abarth la versión más racing de las 3 propuestas, y encontrando un futuro que ya os adelanto que seguro que vendrá cargado de paquetes de mejora, optimización e incluso una variante oficial para competir en rallies.

A estas alturas ya os será familiar la expresión de que un coche deportivo no sólo tiene que parecerlo, sino que además debe demostrar serlo, y ahí el Abarth 124 Spider raya la perfección convirtiéndose en la guinda de un pastel que habla japonés e italiano a partes iguales. El concepto de Abarth es el que mejor define la idea de deportivo puro, apostando por un coche ligero, ágil y muy rápido, una filosofía que por desgracia se ha perdido en muchos fabricantes. Esto no quiere decir que el Abarth peque de coche poco confortable o parco en equipamiento, está bien nutrido de ambos, sino que el trabajo de desarrollo y puesta a punto se ha centrado en ofrecer un coche puramente deportivo donde las sensaciones son su mejor carta de presentación.

El Abarth 124 Spider tiene personalidad propia con una puesta a punto y sonido que no encontrarás en Mazda o Fiat

La concepción del Abarth 124 Spider parte obviamente del Fiat 124 Spider, pero su proceso de ensamblaje y terminación se realiza de una forma bastante diferente. El nacimiento del Abarth 124 Spider se realiza en la planta de Mazda en Hiroshima donde se fabrica el coche casi al completo, pasando después a la planta de Mirafiori en Italia donde Abarth culmina la fabricación, integrando a mano elementos como suspensiones Bilstein, diferencial, escape Record Monza, detalles interiores y pinturas especiales como el acabado en negro mate. El paso por la factoría italiana es uno de los puntos especiales del Abarth 124 Spider, y es que allí se realiza el proceso de forma completamente manual, revisando lo ya completado en Japón y ajustando el que será el coche final. De hecho, las primeras 1.000 unidades llevarán una placa identificativa con el número de serie.

Ya sabemos que parte de la exclusividad del Abarth 124 Spider recae en su proceso de fabricación y en su puesta a punto, pero es el momento de poner a prueba si esa exclusividad se hace notar al volante y realmente marca diferencias con respecto a los Mazda MX-5 y Fiat 124 Spider.

Sentado en el coche y a la espera de que nos den paso en el pitlane, el trabajo de Abarth se hace notar con un especial cuidado en el uso de materiales y una configuración bastante más agresiva que sus hermanos. Sólo con encender su motor queda patente que el espíritu del Abarth 124 Spider es el de un deportivo de raza, y es que el espectacular sonido del escape Record Monza no deja a nadie indiferente, siendo además una de las señas más identificativas de Abarth.

En esta primera pasada al circuito de Los Arcos en Navarra nos ponemos a los mandos del Abarth 124 Spider en configuración de cambio automático por convertidor de par y 6 relaciones. Seleccionamos el modo Sport y abrimos gas, siendo la primera sensación transmitida la de una ligereza y empuje espectaculares. Con 170 CV para poco más de 1.060 kilogramos, lo que está claro es que estamos ante un coche que se presenta tan divertido como rápido. Como ya me pasó tras probar el MX-5, incluso me atrevo a decir que con una potencia inferior la diversión seguiría siendo igualmente muy alta.

Todo el conjunto brilla un altísimo nivel, pero lo que más sorprende es lo divertido y fácil que es conducirlo

Lanzados ya sobre el trazado, el Abarth 124 Spider resulta un coche efectivo, noble y que transmite al conductor todo cuanto sucede. Su trasera se maneja de forma muy sencilla, mostrándose transparente en reacciones, lo que te permite trazar al límite para marcar tiempos o divertirte sin reparos forzando el sobreviraje, pero siempre manteniendo el control y sin ofrecer reacciones bruscas. Literalmente el coche fluye sin importar el ritmo de conducción. Es un coche sencillo de conducir, mucho de hecho, con un motor repleto en todo el cuentarrevoluciones y un alto grado de implicación del conductor. Se deja hacer de todo y sin oponer resistencia, encontrando como único límite el cambio automático de origen Mazada que queda un peldaño por debajo de las posibilidades del coche en conducción deportiva.

Y por este motivo, en la segunda tanda del vueltas al circuito me puse a los mandos del Abarth 124 Spider con cambio manual de seis velocidades. Esta combinación es a todas luces la adecuada, sobre todo para el posicionamiento del Abarth como la opción más radical. Enfilamos de nuevo la recta de meta y ahora sí. Cortos recorridos, tacto duro y preciso, el selector manual permite llegar a la quinta esencia del conjunto del roadster de Abarth. Es el momento de divertirse y la trasera del 124 Spider te invita a ello, cierras dirección, golpe de gas y ahí está el cóctel explosivo de Abarth con el escape Record Monza bramando sin contemplaciones mientras te deslizas encadenando curvas. Una mínima corrección de volante y el control vuelve a ser total para hacer el resto de la pista con tiralíneas.

Con el llamamiento a boxes para cerrar la jornada llega el momento de reflexionar. Abarth ha hecho un muy buen trabajo de diferenciación, lo que ofrece el escorpión es lo bastante distinto a los modelos de Fiat y Mazda como para llevar un sello propio. A sabiendas de que el Mazda MX-5 es un deportivo que ofrece un muy buen nivel de conducción, y se postula como mayor rival del Abarth 124 Spider, la lógica nos dice que la diferencia de precios de en torno a 11.000 euros a favor del Abarth es demasiado abultada. Pero aquí hemos de hilar mucho más fino. Abarth no sólo ha introducido cambios estéticos, logotipos y demás toques de personalización, Abarth ha cambiado de forma notable el carácter del roadster para integrar un motor 1.4 Turbo mucho más lleno, un comportamiento más eficaz y a la vez bastante más deportivo y un sonido único que sólo es posible en un Abarth.

En Diariomotor:

Vista dinámica del Abarth 595 en plena maniobra sobre la pista.
Logo de la marca abarth Abarth 595
Ahorra 8.150 €  23.650 €

Hay que ser muy "quemado" para comprarse un Abarth 500 en cualquiera de sus versiones pero si es tu caso estás de enhorabuena: es uno de los deportivos auténticos más baratos del mercado y que más satisfacciones te pueden dar. Eso sí, no esperes el menor refinamiento en el trato a los ocupantes, asume que ir por autopista supone un dolor de cabeza y prepárate para ir botando en cada arruga del asfalto, así de radical es este pequeño juguete.

Ficha 595
Solicita tu oferta
Cargando...