El preparador alemán Irmscher lleva años – concretamente 47 años, más de los que pensaba – especializado en el tuning de vehículos de Opel. Su último proyecto es obvio: el nuevo Opel Astra K. El compacto sobre el que se basará su principal línea de negocio durante los próximos años. Gracias a su estrecha relación con Opel, ya han sido capaces de adelantarnos algunas de las mejoras estéticas y prestacionales para el vehículo compacto más importante de la marca alemana.
La primera modificación es obvia: nuevos diseños de llantas, en diseños de hasta 19 pulgadas. Además de las llantas, es posible equipar al Opel Astra con la característica calandra de Irmscher, en combinación con acabados de diferentes tonos para la misma. En la carrocería también ofrece la posibilidad de adherir vinilos. Por el momento el único diseño visible sigue la línea lateral, añadiendo dos barras longitudinales sobre el capó. Una preparación muy sutil y ligera, pero suficientemente diferente.
Por otra parte, ofrecen ya kits de suspensión deportiva, que consiguen que el coche se siente 30 mm más cerca del suelo. Hasta el advenimiento de las versiones deportivas del Opel Astra – se rumorea el retorno del Astra GSi, y el retorno del OPC es seguro – será lo más deportivo que podamos obtener con garantía oficial de Opel. Esta garantía también se extendería a las preparaciones de motor: mediante retoques electrónicos podrán muy pronto aumentar la potencia de los motores diésel y gasolina en hasta 30 CV.
¿Cómo suena un Astra con motor 1.4 Turbo de 180 CV?
Fuente: Carscoops
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