Cambiar el aceite a un coche no es complicado. Y sin embargo, es una tarea que nos da mucha pereza, hasta el punto de que la delegamos a talleres y servicios técnicos que pueden cobrarnos un importe muy superior al coste de los materiales por el servicio. De hecho, creo que todo propietario de un coche debería saber cambiar su aceite – en este artículo os hemos hablado de varios motivos por los que creemos que es importante, sobretodo en coches de «batalla», o con algunos años a sus espaldas. Si dicho artículo no os anima a hacerlo, puede que el vídeo de una niña de 12 años cambiando el aceite al coche familiar lo haga.
El proceso de cambiar el aceite siempre comienza elevando el coche, en este caso usando un gato y un par de borriquetas. Es la mejor solución cuando no se dispone de un elevador convencional. Tras aflojar el tornillo del cárter y colocar un recipiente adecuado en su sitio, el aceite usado poco a poco sale del motor. En el caso de este coche, el filtro de aceite es de cartucho, y va situado en el interior de una carcasa plástica. Quizá el único error ha sido no usar una llave específica para este tipo de cajas, en vez de una llave inglesa convencional. Tras rellenar de la cantidad y tipo correcto de aceite, el cambio está hecho.
Es un proceso relativamente sencillo, en el que el padre de la niña ha asistido en todo momento, como es normal y lógico. Es un conocimiento que no muchos niños o niñas de su edad tienen, y que le puede ser útil en un futuro. Soy un firme defensor de hacer las cosas uno mismo, y el conocimiento jamás ocupa lugar. Quién sabe, quizá estas simples labores de mantenimiento despierten en esta niña una gran pasión por los coches y la ingeniería, y quizá ella sea la que diseñe coches en un futuro. Quizá ella sea la que decida en la General Motors del futuro facilitar el mantenimiento de los coches a sus usuarios – soñar es gratis. Sea como fuere, un aplauso para este padre.
