Además de comunicar su intención de olvidar de una vez por todas el halo y tratar de llevar a la práctica otro tipo de protección del habitáculo transparente de cara a la temporada 2018, el Grupo de Estrategia del Mundial de Fórmula 1 ha aprobado limitar de cara a la próxima temporada dos de las prácticas o ingenios que más han dado de qué hablar en lo que llevamos de 2017: las aletas de tiburón y el empleo de aceite de cara a aumentar puntualmente la entrega de potencia.
Lo cierto es que la redacción de la nota de prensa de la FIA en lo referente a las aletas de tiburón y aletines por encima de los capós motor no es extremadamente convincente, señalando que «se han realizado cambios en las zonas delimitadas por reglamento alrededor del capó motor de cara a que diseños que incorporen aletines T y aletas de tiburón estén estrictamente limitados». ¿Lograrán los diseñadores pese a todo darle la vuelta al reglamento de cara al año que viene? No es nada descartable…
Menos visible pero tan importante como esas soluciones aerodinámicas es el rumoreado truco ideado por Mercedes de cara a sacar un extra de potencia mediante un consumo excesivo y puntual de aceite. A ese respecto, el comunicado del Grupo de Estrategia dice que «se tomarán medidas para segurar que el aceite no sea empleado a modo de combustible. Además, sólo un tipo de aceite podrá ser usado para cualquier unidad de potencia a lo largo de todo un fin de semana de Gran Premio».
Foto | Daimler
