El BMW M2 es uno de los deportivos del año, no nos cabe duda. El más pequeño de BMW Motorsport ha causado un gran revuelo, y por qué no decirlo, un gran «hype», posicionándose como heredero espiritual de los BMW 2002 turbo y BMW M3 E30, a los que se aproxima por filosofía y tamaño. Tras haberlo probado, podemos confirmar que todo lo bueno que se dice sobre el BMW M2 es real: es divertido y es efectivo. Sin embargo, el recién horneado Porsche 718 Cayman S discrepa, y le propone al BMW M2 una dura batalla en circuito. ¿Miedo?
Sobre el papel, el Porsche 718 Cayman S emplea una nueva mecánica turbo de cuatro cilindros opuestos. Una nueva filosofía, quizá menos purista, pero más potente y rápida que nunca. El Cayman S desarrolla 350 CV gracias a su nuevo 2,5 turbo, lo que le permite acelerar hasta los 100 km/h en sólo 4,6 segundos, si la unidad equipa una caja de cambios manual – porque en este duelo se usan deportivos con cambio manual. Un peso de 1.430 kg y un gran reparto de pesos juegan a su favor, así como todo el ADN de la marca.
El BMW M2 es un coche más grande. Grande en tamaño, grande en peso y grande en potencia. Su motor no es un 2.5 de cuatro cilindros, es un 3.0 TwinPower Turbo con 370 CV de potencia. Acelera hasta los 100 km/h más rápido que el Porsche, en sólo 4,5 segundos. Con todo, es 140 kilos más pesado, compensando el déficit a base de potencia y par. Los probadores de Autocar los enfrentan en primer lugar a una batalla subjetiva: ¿cuál es el más divertido? El ganador, por consenso, es el Porsche 718 Cayman S. ¿Por qué?
Ambos coinciden en que es un coche más ordenado y preciso que el BMW M2, al que le encanta ir de lado más de la cuenta. El Porsche es un coche en el que el equilibrio dinámico está más logrado, con un paso por curva meteórico, sin drama alguno. Su mayor ligereza también se ha traducido en un tiempo de vuelta inferior al del BMW M2, una vez que comienza la prueba cronometrada. El Porsche completa una vuelta en 1:11,1, mientras que el bávaro demora 1:13,5 en el mismo trazado, prácticamente dos segundos y medio más lento.
Con todo, conviene poner en perspectiva las impresiones de estos probadores británicos. Ambos confiesan que ambos coches rayan a un altísimo nivel, posicionándose como las mejores alternativas posibles con respecto a sus competidores. El Porsche 718 Cayman S es marginalmente mejor que el BMW M2, en sus términos subjetivos, además de más rápido en términos objetivos. En cualquier caso, conviene recordar que en el mercado español, el Porsche 718 Cayman S es 9.760 euros más caro que el BMW M2.
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Porsche 718 Cayman 
