En un reciente viaje a Alemania me llamó mucho la atención la presencia de familiares tradicionales en las carreteras y, más concretamente, de numerosos ŠKODA Fabia Combi de diferentes generaciones. Ese mismo coche de ŠKODA es bastante difícil de ver en nuestras carreteras, a pesar de ser un coche económico y muy práctico. Descartado el factor económico diferencial entre Alemania y España por tratarse de un coche muy asequible ¿por qué ellos se lo compran y nosotros no? ¿es un problema cultural?
ŠKODA Fabia Combi: racional hasta la médula, pero sin alma
Si atendemos a las características técnicas del Fabia Combi, se perfila como el coche que todo el mundo debería comprarse. El Fabia cuenta con la última tecnología del grupo Volkswagen, está bien construido, es espacioso, ofrece más 500 litros de maletero en una longitud total de sólo 4.257 mm y puede funcionar como coche urbano o familiar de carretera. Es polivalente, práctico y económico.
El precio del Fabia Combi es francamente ajustado, bajando de los 10.000 € en su versión más accesible y siempre cuenta con motores frugales y todas las posibilidades de equipamiento que podamos imaginar.
En definitiva, los alemanes se los compran por docenas y disfrutan durante años de un coche práctico, seguro y muy, muy económico, justo lo que están buscando al adquirir un coche. En España esto no sucede, o al menos no en la misma medida. Los Fabia Combi son difíciles de ver. Si no compramos coches como este, ¿qué nos compramos en su lugar?
SUV compactos, ¿moda o carácter?
Una vez más llegamos a los SUV, concretamente los SUV compactos que hacen furor en nuestro país. Primero algunos datos que corresponden a enero-junio 2017:
ŠKODA Fabia – 5.568 ud (sólo una pequeña parte son Combi, pero no tenemos datos desagregados por carrocería)
Peugeot 2008 – 11.075 ud
Renault Captur – 10.418 ud
Los SUV compactos son más caros que los utilitarios familiares, ofreciendo un habitáculo algo más espacioso y un maletero mucho más pequeño dentro de una medida similar. También son menos aerodinámicos, menos ágiles y más pesados, sin que todo esto aporte grandes ventajas que no sean estéticas.
¿Nos hemos vuelto locos?
Este tipo de coches contienen una promesa de aventura y proyectan la imagen de diversión y estilo de vida con la que los españoles, por la razón que sea, nos sentimos más cómodos (no todos, lógicamente, pero sí de forma agregada).
Puede que al principio pareciese una moda, pero pasados los años el segmento de los SUV compactos no hace más que crecer y aún lo hará más (SEAT Arona, Kia Stonic, Hyundai Kona) mientras que otros como los utilitarios familiares (ŠKODA Fabia Combi, Seat Ibiza ST, Renault Clio Sport Tourer) ofrecen coches más económicos, igual o más prácticos y que tienen «más sentido», pero se tienen que conformar con las migajas del mercado.
Yo creo que no es una moda, sino algo que ha encajado con nuestra forma de vernos en el espejo, con nuestro carácter. Incluso ŠKODA lo ha reconocido de alguna manera, lanzando la versión ŠKODA Fabia Combi Scout, una edición campera en la que se añaden algunos detalles decorativos y una suspensión ligeramente elevada (ver imagen) intentando transformar su frío Fabia en algo un poco más sexy.
Si no puedes con ellos, únete a ellos.
Skoda Fabia Combi 
