Los sistemas de navegación mediante posicionamiento GPS se han convertido en uno de los gadgets más populares en el automóvil, su integración se ha convertido en un obligado en vehículos de cualquier categoría, ofreciendo una herramienta de amplias posibilidades con características añadidas tan importantes como el estado del tráfico, la información en tiempo real de incidencias y la localización de puntos de interés.
Una de las firmas líderes en el mercado de sistemas de navegación, tanto como equipamiento de serie como aftermarket, es TomTom. Su actual campo de acción pasa por convertirse en la principal referencia mundial en servicios de navegación mediante la inclusión de su servicio de mapas y soluciones en el equipo original de multitud de fabricantes. En una oportunidad única, TomTom nos permite conocer la realidad de este mercado y las claves que permitirán su evolución.
Información de ida y vuelta, cuanta más… mejor
El navegador tradicional como aquel dispositivo que adolecía de actualizaciones y servicios en tiempo real ha muerto. El verdadero objetivo ahora es centrar la navegación en un entorno interactivo donde el intercambio de información por parte de una comunidad de usuarios, permite un verdadero beneficio colectivo que ofrece actualización de mapas, estado de la carretera en tiempo real y puntos de interés.
TomTom ha centrado sus esfuerzos en fomentar el aspecto más social de sus soluciones de navegación. HD Traffic es uno de los pilares básicos en la continua revisión de los mapas de navegación, un punto clave donde los usuarios comparten la información recopilada en relación a ubicación, dirección y velocidad es compartida por toda la comunidad de usuarios para conocer al detalle el estado del tráfico.
El crecimiento de usuarios que emplean el servicio HD Traffic supone un aspecto fundamental, siendo acompañado por el servicio de gestión vía web, el mapeado realizado por las unidades móviles y los diferentes centro con los que cuenta TomTom para la recopilación y gestión de datos. Estos aportes suponen el grueso de las fuentes de información que permiten la actualización diaria. Según TomTom, son más de 50.000 las fuentes que permiten esta realidad.
Concibiendo el factor «en tiempo real»
Resulta obvio que el volumen de información generado es apabullante, en torno a 7,5 Trillones de puntos de información registrados en 195 países distintos, por lo que su magnitud obliga a un gran respaldo capaz de brindar un acceso rápido y sencillo al usuario. TomTom ha diseñado una herramienta de asimilación de información, revisión y actualización capaz de brindar reportes sobre cambios en un tiempo máxima de 48 horas.
La tecnología OpenLR se postula como una de las grandes propuestas para conseguir la implementación de actualizaciones ya revisadas en un tiempo muy reducido. OpenLR ofrece un protocolo de código abierto para el intercambio de información y posicionamiento que permita desarrollar una red de transporte inteligente avanzada. Las posibilidades de OpenLR son amplias en la adopción del concepto de vehículo conectado, siendo su condición de código abierto el verdadero potencial de la plataforma.
¿Cuál es el futuro de los sistemas de navegación?
En resumidas cuentas, ofrecer más, más y más. La navegación en sí misma goza a día de hoy de un nivel de calidad más que sobresaliente gracias a la aplicación del concepto de tiempo real, hasta aquí podría decirse que la navegación ha cumplido con sus objetivos absolutos encontrando su meta final. Es entonces cuando la reinvención de sus posibilidades brinda una nueva forma de entender y ver los trayectos definidos.
La actualización de las tecnologías de captación permite ofrecer visión panorámica de los entornos en tres dimensiones, consiguiendo identificar las características de la vía como son señales, carteles y similares. La incorporación de esta información adquirida de primera mano ofrece una base de datos precisa sobre la realidad de cada una de las vías.
Pero el futuro va más allá, siendo el estudio de las rutas y los trayectos alternativos el siguiente objetivo para el ofrecimiento de rutas. De este modo, analizando el comportamiento sobre la conducción y la influencia de las variables externas se permite definir trayectos reales donde la conclusión del trayecto más corto se visualizará en función de las posibilidades de la vía, del estado del tráfico en tiempo real y del análisis de la conducción ofrecida por los usuarios.
El análisis inteligente de la conducción en relación con la información ya almacenada ofrece un verdadero reto para la evolución de los sistemas de navegación. Pensemos que la idea ofrecida no es otra que contar con una ruta completamente personalizada donde se tenga en cuenta desde la velocidad de la vía hasta la congestión, pasando por las verdaderas posibilidades que ofrece el tráfico real. Un reto que permitirá hablar de verdaderas rutas alternativas.
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