El Toyota Auris HSD ha sido la principal novedad de Toyota en Ginebra, junto al lavado de cara de toda la gama Auris. HSD son las iniciales de Hybrid Synergy Drive, el sistema híbrido de Toyota que al menos en el mercado europeo sólo había encontrado su hueco bajo el capó del Prius y algunos Lexus de posicionamiento Premium. Por lo que parece, la ofensiva híbrida de la corporación asiática ha puesto a los compactos como caballo de batalla.
Lexus tendrá el CT 200h – basado en la plataforma del híbrido dedicado HS 250h – y Toyota una opción de coste más razonable y aproximación generalista sobre la base del Auris. Estéticamente hay pocas diferencias con sus hermanos de gama, aunque se nota un frontal más aerodinámico y una insignia de capó con el fondo azul. El perfil lateral nos revela llantas más amables con las corrientes de aire, en diseños de 15 y 17 pulgadas directamente “levantados” de su hermano superdotado, el Prius.
En la zaga el paragolpes es algo más grande y esconde un difusor muy discreto. De manera sorprendente, pintado en blanco metalizado, tiene un aspecto más deportivo que los demás Auris y lo cierto es que también más potente que las versiones de gasolina o Diesel. En el interior no hay apenas cambios, salvo detalles como la palanca de cambios de tipo by-wire del cambio de marchas CVT y un indicador del estado de carga y estado de la propulsión eléctrica en lugar del tradicional cuentavueltas. El monitor de energía se integra en las pantallas multifunción.
Era la primera vez que me subía a un Toyota Auris y he de decir que me ha impresionado gratamente. Los acabados son muy buenos – aunque es una percepción tomada de una unidad full-equipe – y el salpicadero estaba recubierto de un plástico blando muy agradable al tacto. El puesto de conducción me ha parecido ergonómico y diáfano, ideal para sentirnos cómodos al volante. El espacio es muy considerable tanto en las plazas delanteras como en las traseras, incluso con los asientos delanteros muy echados para atrás.
Se deben de hacer viajes muy cómodos en este compacto japonés, pero también hay algún detalle negativo. Debido a que no es un híbrido dedicado, se ha adaptado el sistema híbrido y ha habido que encontrar hueco para las baterías de NiMh. Ese lugar ha sido el maletero, que pierde algo de capacidad y tiene una forma un tanto peculiar. Es el pequeño precio a pagar para disfrutar de un consumo de combustible líder absoluto en su categoría, ningún diesel o gasolina compacto logra acercarse a su media homologada de 3.8 l/100 km.
Gracias a un coeficiente aerodinámico reducido a 0.283 y la adaptación del sistema de propulsión full-hybrid del Prius, puede tratar de tú a tú a utilitarios de bajo consumo como el Volkswagen Polo Bluemotion, e incluso emitir el mismo dióxido de carbono: sólo 89 g/km. Aunque los Polo menos gastones tengan una media de consumo de 3.3 l/100 km, el gasóleo produce más dióxido de carbono en su combustión que la gasolina, de ahí la diferencia. El sistema HSD tiene una potencia combinada de 136 CV, igual que el Prius.
Combina un motor 1.8 VVT-i de ciclo Atkinson y 99 CV con un eléctrico del que se aprovechan 37 CV y 207 Nm de par motor. El resultado final son los citados 136 CV y un par motor desconocido, pero superior a los 300 Nm en cualquiera de los casos. Desde parado y pisando a fondo el acelerador no tardaremos más de 10 segundos en rodar a 100 km/h. Con una conducción más tranquila podremos llegar a los consumos homologados, que sorprendentemente – o quizá no – son más favorables al ciclo urbano.
La frenada regenerativa o la desconexión del motor de gasolina en paradas hacen que el desperdicio de combustible sea mínimo en la ciudad. Tendrá al igual que el Prius un modo EV en el que sólo se empleará la energía almacenada en las baterías para recorrer hasta 2 km sin gastar una gota de gasolina, a una velocidad máxima de hasta 50 km/h. A la espera de los detalles de equipamiento, hemos sabido que en Holanda se pone a la venta por algo menos de 23.000€, en España, con una fiscalidad más favorable, bajará de 22.000€.
Las alternativas a este compacto híbrido son la práctica totalidad de compactos diesel, con los que habrá que calcular a partir de cuantos km sale a cuenta el Auris HSD. La otra opción es el Lexus CT200h, más Premium y destinada a competir con Audi A3 y compañía. Lo que es seguro y además me lo creo, es que la calidad de vida a bordo será superior a la de sus rivales gracias a sus bajos niveles de ruido y vibraciones (en inglés NVH, noise-vibration-harshness) y un aislamiento mejorado. Se pone a la venta de manera inminente, antes del verano.
Toyota Auris HSD, el primer compacto híbrido estaba en Ginebra
Toyota Auris 2010
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