Hace tan solo unos días Kia nos reunía para probar los últimos modelos que han lanzado a la venta en España. Previamente tuvimos la oportunidad de probar el nuevo Kia Sorento en carretera y campo y para finalizar tuvimos una pequeña toma de contacto con los nuevos Kia Cee’d y Kia Venga.
Nuestra prueba se centró principalmente en varios Kia Venga con distintas motorizaciones, acabados y equipamiento. El test transcurrió por un tramo de carreteras secundarias con curvas y a velocidades moderadas y culminó con una pequeña vuelta rápida «a cuchillo» en un circuito de karting, un slalom de conos y una frenada asimétrica.
Tengo que reconocer que la nueva hornada de vehículos Kia me cae bien y entre otras cosas me gusta por que poco a poco han ido mejorando estéticamente con pequeños detallitos como la nueva parrilla y defensas más agresivas. La calidad de los acabados también ha mejorado, y eso es algo que se aprecia nada más entrar por la puerta.
Uno de los modelos más peculiares que ha introducido Kia recientemente es el Kia Venga, un pequeño monovolumen de cinco puertas relativamente alto, con motores diésel y gasolina entre 75 y 128 CV. Por dimensiones y precio pretende competir con modelos como el Citroën C3 Picasso, Ford Fusion o el antiguo Opel Meriva, y en cualquier caso no tiene nada que envidiar a ninguno de ellos.
Su altura se nota cuando tomamos asiento en el habitáculo. La sensación es más de «subir a bordo» y no «agacharse para sentarse», a diferencia del grueso de los utilitarios del mercado, ahí se nota precisamente su vocación de monovolumen. Las plazas traseras por su parte tienen espacio suficiente para estirar las piernas y una anchura suficiente, sin ir sobrado, para tres pasajeros adultos (no más que cualquier utilitario de cinco puertas), amén de una altura al techo bastante considerable.
La calidad de los materiales y acabados del salpicadero es muy decente y acorde con su precio. Los asientos de tela y piel sintética son bastante buenos para un pequeño monovolumen, aunque carezcan de una buena sujección lateral y lumbar.
También hay que tener en cuenta que probamos un Kia Venga diésel muy bien equipado. En cualquier caso los Kia Venga más básicos carecen de buena parte del equipamiento y de algunos materiales de buena calidad que sí incluía nuestra unidad de pruebas y tienen algunos detalles más mundanos como llantas de acero con tapacubos (bonitos, pero tapacubos al fín y al cabo).
Tuve la oportunidad de probar un Kia Venga 1.6 CRDi Emotion de 128 CV (17.752€ con descuentos), tope de gama de mecánica y acabados. Las suspensiones quizás son un pelín duras para un vehículo que está concebido para un uso principalmente urbano, pero este detalle se convierte en ventaja cuando salimos por carreteras de curvas (hicimos la prueba en un slalom de conos) y vemos que pese a su altura no se acusa un balanceo excesivo.
El motor es muy suave, pero algo ruidoso a bajas vueltas. En el caso concreto de nuestra unidad de pruebas equipaba el paquete de mejoras ecoDynamics que de serie incluye un sistema de parada y arranque automático del motor para bajar los consumos en trayectos urbanos. Como os podéis imaginar, 128 CV son más que suficientes para hacer que este pequeño Kia Venga se mueva con brío.
Por último tuvimos un pequeño contacto con el Kia cee’d en una pista de karts, donde pudimos probar «a cuchillo» este compacto en un trazado muy ratonero donde como os podéis imaginar sufrió de lo lindo, incluyendo algún que otro derrape tirando de freno de mano.
En este caso el pequeño «test deportivo» no fue suficiente para ofreceros un análisis del renovado Kia cee’d. Tomamos nota para buscar una ocasión más propicia y ofreceros una prueba más detallada y pormenorizada a la altura de este compacto coreano. Espero que comprendáis que las limitaciones de tiempo dentro de la apretada agenda del evento organizado por Kia nos impidieron un análisis más extenso.
Kia Venga y Kia Cee’d
En Diariomotor: Kia Cee’d en Frankfurt 2009 | Kia Venga en Frankfurt 2009 | Kia Sorento, toma de contacto en campo y carretera
Kia Venga 
