El SUV europeizado de General Motors, también conocido como Chevrolet Captiva, se ha dado un baño de actualizaciones ahora que cumple unos cuantos años en el mercado. En el Salón de París que arranca a finales de mes lo veremos con una nueva cara cuyos rasgos se acercan a los del Chevrolet Cruze.
Todo el semblante del Captiva toma una nueva forma engrandeciendo su entrada de aire para la refrigeración e integrando unos faros más finos que los anteriores. Para perder un poco la imagen de todoterreno desplaza las luces antiniebla hacia una posición menos elevada y la protección inferior del parachoques pierde relevancia en la “primera fila”. Hay pequeños detalles cambiantes como las pequeñas branquias situadas en las aletas.
Otros aspectos como las carcasas de los retrovisores o los arcos de rueda en plástico oscuro no varían. En la trasera todo permanece tal cual estaba a excepción de los grupos ópticos, con distinto formato pero igual diseño interior. La oferta de llantas de aleación ahora oscila entre varios diseños de 17 a 19 pulgadas de diámetro, como las sencillas de cinco radios que se ven en las fotos. ¿Y por dentro? Tendremos que echarle imaginación por el momento porque lo único que sabemos con seguridad es que soportará cinco o siete plazas y que tendrá un diseño renovado.
A nivel de mecánicas habrá jugosas novedades en especial relación con los motores que más aceptación tienen en nuestro mercado, los diésel. El actual 2.0 VCDi deja paso a un nuevo turbodiésel common-rail VCDi de 2.2 litros con dos potencias a elegir, 163 o 184 CV. Ello supone subir el listón de acceso y abandonar el VCDi de 126 CV que se antojaba bastante escaso para el tamaño del Captiva. En gasolina se mantendrá la opción del 2.4 de 171 CV.
Habrá versiones de tracción delantera y de tracción total. Esta última estaba reservada hasta ahora para el motor diésel de mayor potencia pero me imagino que Chevrolet permitirá combinarla con los dos niveles de potencia. Sobre el chasis también se han practicado algunos cambios que no han sido detallados y en su equipamiento no faltarán los controles de estabilidad, la función de asistencia al arranque en cuesta o un nuevo equipo de audio con conexiones auxiliares entre otras cosas.
A priori el Chevrolet Captiva parece ahora un poco más coche aunque puede ser la impresión de la novedad. Las mejoras practicadas con los nuevos motores a gasóleo podrían sumarse a lo anterior para aumentar el atractivo del SUV. En relación con esto último, el Opel Antara que comparte muchos aspectos con el Captiva también se beneficiará de los nuevos VCDi. Y junto al Captiva en París también veremos al Aveo, al Cruze de cinco puertas y al Orlando.
Chevrolet Captiva 2011
Vía: Chevrolet
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