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El Volvo C30 eléctrico se pasea por la nieve y sus baterías se resienten

Sin hacer mucho ruido, Volvo es actualmente una de las marcas líderes en el desarrollo de vehículos eléctricos e híbridos enchufables. Será la primera marca que lance al mercado un híbrido plug-in diesel de producción con el Volvo V60 Plug-In Hybrid, pero además este mismo año van a fabricar las primeras 50 unidades del Volvo C30 eléctrico, que en un principio nacen como mulas de pruebas para testar la tecnología eléctrica en condiciones reales de funcionamiento.

Hasta que ese momento llegue, la firma sueca sigue promocionando las bondades de su modelo. Hace un par de meses nos mostró los tests de choque del coche, para demostrar que su seguridad está a la altura de los coches con motor térmico convencional. Ahora han facilitado una serie de datos acerca de la respuesta de la mecánica eléctrica ante temperaturas extremas, después de haber rodado en pruebas por las zonas heladas del norte de Suecia.

Es lógico que realicen este tipo de pruebas, ya que todos los coches de producción deben soportar temperaturas extremas, tanto positivas como negativas. Los resultados publicados por Volvo sirven para comprobar lo mal que sienta el frío a las baterías, una desventaja inherente a estos dispositivos de almacenamiento de energía eléctrica. Por tanto, no es que sea problema de Volvo sino que es un fenómeno inevitable con la tecnología actual.

Vayamos a las cifras: las condiciones de homologación determinan que el Volvo C30 eléctrico alcanza una autonomía de 150 km. En las pruebas de Suecia, la autonomía se vio disminuida hasta 90 km con temperaturas ambiente de 10 grados bajo cero, y se redujo hasta 80 km con 30 grados bajo cero. Es decir, la capacidad de las baterías se ve reducida hasta en un 40% en estas condiciones, aunque en pocas zonas del mundo nos encontraremos un clima tan extremo.
Volvo C30 eléctrico en la nieve

El Volvo C30 eléctrico cuenta con tres equipos de climatizacion diferentes para combatir temperaturas tan bajas: uno sirve para calentar el habitáculo, otro para las baterías y un tercero para el motor eléctrico. Estos tres sistemas reducirían aún más la autonomía útil del vehículo, por lo que Volvo también ha instalado un calentador alimentado a través de un depósito de bioetanol de 14.5 litros que genera calor para insuflar en el circuito de climatización del habitáculo.

Por lo demás, el coche seguirá en pruebas a lo largo de este año antes de su supuesta llegada al mercado a nivel comercial, algo que podría ocurrir en 2012.

Fuente: Volvo
En Diariomotor: Volvo C30 | Volvo C30 eléctrico | Volvo muestra la seguridad del Volvo C30 eléctrico

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