ESPACIOS
Cerrar CERRAR
Entrada

7 MIN

Citroën C4 Picasso 1.6 HDi 110 Millenium, a prueba (I)

Tras haberos contado hace unos días la toma de contacto con la gama Megane 2012 en Sevilla, y en el circuito onubense de Monteblanco, toca ahora contaros la prueba, en esta ocasión en profundidad, de otro galo, que luce en su parrilla en lugar del rombo los chevrones y que se aleja de la deportividad del RS para adentrarse en el mundo de la practicidad y el ambiente familiar.

Estamos ante el Citroën C4 Picasso, un best seller de los monovolúmenes, habitual en nuestras ciudades y carreteras y que se convertirá durante una semana en nuestro compañero de día a día para conocerlo a fondo. El motor elegido, otro popular, el HDi de 110 caballos que en la unidad probada se encuentra asociado con el cambio manual pilotado CMP, todo ello con un acabado Millenium. Arrancamos con la prueba del C4 Picasso.

Motor 1.6 HDi: 112 caballos con un consumo urbano homologado de 5.1 l/100km

Como es ya costumbre, antes de ponernos al volante de este C4 Picasso, conviene hacer un repaso a sus características técnicas, dimensiones, motorización… Como hemos visto se trata del motor diésel HDi en su versión de 110 caballos. Por encima se encuentra el HDi de 150 caballos mientras que en gasolina la oferta se completa con el VTi de 120 caballos y el THP de 155 caballos.

El motor HDi es un 4 cilindros de 1.560 centímetros cúbicos que entrega una potencia de 112 caballos y un par de 285 Nm a 1.750 rpm. Con estas cifras el Citroën C4 Picasso registra una velocidad máxima de 181 km/h con una aceleración en el 0 a 100 km/h de 13.3 segundos, unas décimas inferior si lo configuramos con el cambio manual en lugar del pilotado.

Los consumos homologados por el C4 Picasso con el cambio CMP son de 5.1 l/100 km en consumo urbano, 4.5 l/100 km en extra urbano y una cifra en ciclo mixto de 4.8 l/100 km. Todas las cifras son inferiores a las del cambio manual salvo en extra urbano, donde ambos empatan. Las emisiones de CO2 son de 125 g/km.

Las dimensiones del C4 Picasso son de 4.47 metros de largo, 1.66 metros de alto y 1.83 metros de ancho. Su coeficiente aerodinámico es de 0.31. La capacidad de carga de su maletero es de 500 a 1.734 litros. Los neumáticos empleados en la prueba son unos Michelin Primacy HP con unas dimensiones de 215/50 en unas llantas de 17 pulgadas.

Seguramente alguien lo haya asociado ya a una reciente prueba, la del Peugeot 508 y es que este modelo cuenta con el mismo propulsor y la misma caja de cambios que daban vida a la berlina del león.

Un diseño exterior atractivo dentro del segmento con un buen interior

Un primer vistazo a su diseño me deja con una grata satisfacción para tratarse de un vehículo perteneciente a un segmento donde la practicidad limita en gran parte de las ocasiones al diseño. En el C4 nos encontramos con un diseño alto de líneas redondeadas en su frontal, en el que destaca el conjunto cromado de los chevrones, pero sobre todo el enorme cristal delantero, mientras que en el lateral encontramos el principal rasgo distintivo en el perfil creado por el marco de las ventanas laterales. Su trasera sigue con la estética de líneas redondeadas del frontal, con cierta inclinación en el pilar posterior que culmina en un alerón.

Es el momento de conocer el habitáculo de este C4 Picasso. Abrimos la puerta y nos encontramos con un gran espacio. Dos butacones amplios y mullidos nos dan la bienvenida a la parte delantera. Son cómodos, bastante blandos, grandes… geniales en cuanto a comodidad se refiere. Cuentan con regulación manual y otro detalle a tener en cuenta, por ser el tipo de vehículo que es, es su tejido, aparentemente fácil de limpiar.

Echando la vista al frente nos encontramos con la visión del gran cristal delantero. Es enorme y seguro que será una de las primeras cosas que comentará todo aquel que se monte con el propietario de un C4 Picasso. En esta gran superficie acristalada destaca además dos detalles para reforzar la comodidad de su uso diario. Los parasoles se pueden desplazar a lo largo del cristal para cubrirnos del sol, detalle importante teniendo en cuenta que ahora contamos con unos cuantos centímetros de cristal más que de costumbre. El segundo detalle, llega desde un segundo espejo retrovisor pensado para poder vigilar cómodamente a los ocupantes de las filas traseras.

El C4 Picasso ofrece un puesto de conducción elevado con asientos cómodos, grandes y blandos

En el salpicadero nos encontramos en el centro con los mandos dedicados a la radio y equipo de música que además, pueden ser ocultados bajando una tapa. Sobre este apartado se encuentra el cuadro de instrumentos digital, ubicado en una posición central, en el que podemos ver el velocímetro y el indicador de nivel de combustible a un lado, una pantalla donde aparece el navegador junto al ordenador de abordo, donde se nos indica consumos de carburante, autonomía o distancia recorrida y la emisora de radio o la música del equipo mp3.

A la derecha de esta pantalla nos encontramos con el cuentarevoluciones, el indicador de marcha y un gráfico que nos avisa de quién lleva o no lleva puesto el cinturón. Bajo esta gran pantalla indicadores lumínicos sobre otros parámetros como el freno de mano, electrónico, junto a la palanca, ESP… La instrumentación se completa con las pantallas del climatizador ubicadas en los laterales, próximas a las puertas.

Desde el puesto de conducción cabe destacar también el volante multifunción que cuenta con el polémico diseño de centro fijo. La palanca del cambio CMP se ubica tras el volante en la parte superior, contando también con cambio accionado por levas. Sorprende el nivel de guanteras y huecos para llevar objetos. Sobre el salpicadero tenemos dos guanteras amplias, además contamos con la guantera tradicional, también de generosas proporciones y finalmente con un espacio refrigerado en el centro.

Su habitáculo cuenta con un gran espacio, un buen ajuste de los materiales y un gran número de huecos

Dejamos los butacones delanteros y nos sentamos en la bancada trasera. Aquí el espacio sigue siendo bueno, como han recalcado todos los que han ocupado las plazas traseras. El espacio para tres adultos es más que óptimo, sobre todo destacando la nula presencia de puente central que mejora considerablemente el espacio trasero. Los ocupantes de las plazas traseras cuentan con salidas de aire en los pilares laterales y siguiendo con los elementos de confort nos encontramos con bandejas tras los asientos delanteros y con cortinillas para el sol en los laterales.

En definitiva nos encontramos con un buen interior, con un gran espacio, asientos cómodos y de buena ergonomía, multitud de huecos y un buen ajuste y tacto en los materiales empleados para su configuración. Me gusta el interior de este C4 Picasso, al igual que su exterior, salvando la diferencia de que en este último caso es más subjetivo que al tratar su habitáculo.

No me olvido del maletero, también a tener en cuenta en un coche de estas características. Abrimos el portón y nos encontramos con un carrito, llamado Modubox, plegado y fijado en el lateral. Hay un gran espacio de carga, de fácil acceso y con una boca de carga cómoda y al igual que en el interior con más soluciones prácticas, como la red para sujetar la carga.

Una buena sensación en lo que a diseño exterior y habitabilidad y acabado de su interior se refiere, pero ahora, toca poner en marcha al HDi para comprobar qué tal se desenvuelve el C4 Picasso, pero eso será en la próxima parte de esta prueba.

En Diariomotor: Citroën C4 Picasso y Grand C4 Picasso, equipamiento y precios| Citroën C4 Picasso y Grand C4 Picasso 2011

Cargando...