Volkswagen nos propone una berlina híbrida un tanto peculiar. Primero, porque se trata de un producto con una concepción muy norteamericana, un mercado en el que de un tiempo a esta parte se ha puesto muy de moda el sedán medio híbrido. Segundo, porque recurre a una combinación muy poco habitual, es un híbrido con motor térmico sobrealimentado, y para más inri, una transmisión automática de doble embrague (DSG de 7 velocidades). Su precio es de 30.750 euros, siendo la alternativa más cara del Volkswagen Jetta. Su gama de acabados se divide en dos opciones, Hybrid – a secas – y Hybrid Sport.
Ya os decíamos que el corazón de este Volkswagen Jetta Hybrid es un motor 1.4 TSI de 150 CV complementado con un motor eléctrico de 27 CV. En conjunto hablamos de 170 CV y un consumo homologado de 4,1 litros/100 kilómetros en ciclo combinado y unas emisiones de 95 g/km de CO2. Evidentemente está exento de pagar el Impuesto de Matriculación.
Para hacernos una idea, un Jetta Hybrid Sport con su cambio automático cuesta exactamente lo mismo que un Jetta Sport 2.0 TSI 210 CV DSG 6. El diésel 2.0 TDI de 140 CV – también automático – sería aproximadamente 2.360 euros más barato.
El Volkswagen Jetta Hybrid ya incluye de serie faros antiniebla con luz de giro, luces traseras LED, radio CD con pantalla táctil TFT (que informa del flujo de energía del sistema híbrido), sensor de lluvia y sistema de climatización bizona. El Volkswagen Jetta Hybrid Sport añade llantas de 17” con diseño Queensland o Buenos Aires, ordenador de a bordo Premium y faros bi-xenón con iluminación diurna LED. El handicap del híbrido, por la posición de las baterías de ión de litio, lo tenemos en que sin rueda de repuesto temporal su maletero ya se ve reducido a 374 litros (el Jetta no híbrido homologa 510 litros de maletero).
Dada la diferencia de precios existente con el modelo de gasóleo, es evidente que la opción ideal para el que tenga que recorrer muchos kilómetros seguirá siendo el diésel. No obstante el Volkswagen Jetta Hybrid, por su concepción, parece un modelo interesante para el que necesite una berlina cómoda, práctica y ahorradora en ciudad y carretera. También para dar por primera vez el salto a un modelo híbrido sin que este resulte traumático. Pienso que el DSG de 7 velocidades puede ser mucho más intuitivo y gratificante para algunos clientes que el CVT de otros híbridos de la competencia.
Como opción deportiva también es interesante. El cambio DSG en combinación del motor eléctrico y el pequeño 1.4 TSI sobrealimentado hacen que sus prestaciones sean decentes (0 a 100 km/h en menos de 9 segundos), pero siguen estando lejos de los 7,2 segundos del Volkswagen Jetta Sport 2.0 TSI DSG 6 de 210 CV que cuesta exactamente lo mismo.
Fuente: Volkswagen
En Diariomotor: Volkswagen Jetta Hybrid, a la medida del cliente norteamericano | Prueba del Volkswagen Jetta 2.0 TDI de 140 CV
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