¿Quién dijo que los motores diésel estaban condenados? ¿Quién dijo que los deportivos no podían funcionar con gasóleo? SEAT podría volver a llevar al mercado una de sus apuestas más arriesgadas comercializando variantes Cupra asociadas a los últimos motores TDI del grupo Volkswagen. Desde aquel SEAT Ibiza Cupra 1.9 TDI de 160 CV, la idea de vender deportivos diesel había sido enterrada, pero ahora SEAT estudia muy seriamente recuperar esta opción diésel en la actual gama Cupra.
Aunque de un tiempo a esta parte los motores diésel han visto como las normativas anticontaminación están complicando su supervivencia, lo cierto es que todavía estamos ante un tipo de motor que todavía goza de elevado protagonismo a nivel de ventas. El tirón diésel no ha cesado en el mercado europeo, motivo por el que todavía será fácil ver a fabricantes como SEAT pensar muy seriamente en el impulso de iniciativas como el regreso de los Cupra TDI.
Aunque en la actualidad los acabados FR que ofrece la gama SEAT ya cuentan con mecánicas diésel, los techos de estas opciones se quedan en los 180 CV de la última evolución del bloque 2.0 TDI. Pero con la llegada de la nueva generación del Volkswagen Passat, se dio a conocer una nueva versión de este motor 2.0 TDI con configuración Bi-turbo para alcanzar una potencia máxima de 240 CV.
La actual gama Cupra de SEAT está compuesta por un bloque 1.4 TSI de 180 CV en el SEAT Ibiza Cupra y un 2.0 TSI de 280 CV en el caso del SEAT León Cupra. La llegada de motores TDI a la gama Cupra siempre sería ubicándose un peldaño por debajo de la potencia máxima desarrollada por las mecánicas gasolina, defiendo prestaciones similares gracias al elevado par motor de los motores diésel y ofreciendo unos consumos más contenidos que las variantes movidas por motores gasolina.
Fuente: Autocar
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