Aunque su nombre pueda confundirnos, el Jaguar BlackJag Concept no tiene nada que ver con la marca británica de Coventry, aunque su espíritu sí pueda revelar algunas de las claves de la estética de los deportivos producidos en las islas. Por curioso que resulte, el exótico prototipo que ves en estas imágenes fue diseñado en Barcelona y construido en Turín. Y ahora, diez años después, busca a un comprador que esté dispuesto a pagar 2,8 millones de euros por una pieza única como esta. ¿Estará alguien dispuesto a pagar lo que cuestan, prácticamente, un McLaren P1, un Ferrari LaFerrari y un Porsche 918 Spyder juntos?
Partimos de que este Jaguar BlackJag, construido en 2004, es una auténtica bestia, con todas las letras. Un deportivo de 1.350 kilogramos equipado con un motor V10 de 7.000 cm3, con 640 CV de potencia y unos registros dignos de admiración. Realizaba el 0 a 100 km/h en 3,8 segundos y su velocidad punta sin restricciones rondaba los 337 km/h. Con esas cifras no nos quepa la menor duda de que hubiera podido situarse entre los mejores superdeportivos de la década pasada.
Pero, ¿cómo nació el Jaguar BlackJag? ¿por qué se diseñó en Barcelona?
El Jaguar BlackJag fue diseñado y construido por el estudio independiente Fuore Design, afincado en Barcelona desde 1999. Su fundador, Erwin Himmel, que otrora trabajó con entusiasmo para Audi, el Grupo Volkswagen, diseñadores de la talla de Peter Schreyer y en otros de nuestros prototipos clásicos, como el Audi Quattro Spyder del 91. En algún momento a mediados de los noventa decidió echar a volar por su cuenta, estableció un estudio de diseño industrial cerca de Sitges – con el que siguió colaborando de manera independiente con el Grupo Volkswagen – y más tarde abrió las oficinas en Barcelona de Fuore Design, un estudio con un equipo de 35 diseñadores internacionales.
En aquellos años, Fuore Design comenzó a recibir numerosos encargos de marcas como Mitsubishi y Subaru para realizar diferentes prototipos muy conceptuales que mostrasen la línea a seguir por productos tan emblemáticos como el Pajero (Montero). Una línea que, por suerte, jamás seguirían.
En cuanto Fuore Design dejó de recibir encargos, el equipo de Himmel comenzó a desarrollar sus propias ideas y plasmarlas en prototipos ajenos, aunque el nombre pueda hacernos pensar lo contrario, a otras marcas, como el XF10 o el Jaguar BlackJag Concept de 2004, que estaba basado en el anterior. Años más tarde, la crisis les obligó a cerrar sus puertas y, una década después, el prototipo BlackJag reaparece en una web de venta de vehículos de segunda mano y con un precio astronómico, 2,8 millones de euros. Negociables, eso sí.
¿Habrá algún coleccionista dispuesto a pagar tal cantidad por un coche como este?
Fuente: Mobile.de
En Diariomotor: Prototipo clásico. Audi Quattro Spyder (1991)
