Acabamos de recibir la noticia. El esperado Shelby GT350 Mustang acaba de revelar su potencia. Hablamos de unos tremendos 526 CV extraídos de un bloque 5.2 V8 atmosférico. Sí amigos, un V8 estadounidense que ha roto la cifra de los 100 CV/litro, algo nunca visto antes en motores de calle y producción en masa. Y es que el ocho cilindros del futuro Shelby GT350 es un motor muy especial. Realmente Ford se ha puesto las pilas y han creado un propulsor que nada tiene que envidiar a lo mejor de Europa.
Me comentan que el BMW M4 está teniendo un ataque de ansiedad en estos momentos.
Este V8 está construido en aluminio, y su cigüeñal de fondo plano permite un régimen de giro más alto que el de un motor con cigüeñal convencional. ¿Otro ejemplo de un vehículo con cigüeñal de fondo plano? La última Yamaha R1, calzada con un motor tetracilíndrico capaz de girar a 14.000 rpm. El bloque motor de aluminio del Shelby GT350 ha sido manufacturado con procesos industriales novedosos que eliminan el actual recubrimiento de las camisas de los cilindros, reemplazándolo por un recubrimiento de plasma aplicado al bloque en el momento de su fabricación. Suena complicado y lo es, pero el resultado es un V8 muy ligero capaz de girar a casi 9.000 rpm.
¿Quién dijo que los Mustang sólo podían ir en línea recta? El Shelby GT350 viene a destruir dicha afirmación mediante una puesta a punto de circuito y armas como la suspensión independiente trasera, una de las principales novedades de la actual generación. Además de su tremenda potencia y sus impresionantes 580 Nm de par motor, los puristas estarán satisfechos con su caja de cambios Tremec TR-3160, una brillante unidad manual de seis relaciones con carcasa de aluminio y un embrague de alta resistencia.
Válvulas huecas, un cuerpo de acelerador de una sóla cavidad de 87 mm… todos los ingredientes se conjuran para que el Shelby GT350 sea una absoluta bestia. Ya hemos visto que sonar, suena muy pero que muy bien.
Fuente: Motorward
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