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No es el Papamóvil ruso, es una carroza Chrysler PT Cruiser de pesadilla

La pesadilla es aún peor que la del PT Cruiser transformado en alien. Por todos es sabido que en Rusia todo es… diferente. No sé si el frío del invierno les sienta mal, pero una gran parte de las mayores locuras automovilísticas del mundo proviene de la «Madre Patria». Lo que una empresa llamada Exclusive Limo ha hecho es traer al Siglo XXI las elegantes carrozas de los zares de Rusia, en las que se casaban hace ya un siglo.

Pero lo han hecho con una aproximación de pesadilla, digna de un Papamóvil distópico.

¿Pasaría la ITV semejante engendro en España? Está al nivel de lo mejorcito de la Maxi Tuning…

Para empezar, la base. De todos los coches que hay en el mercado, han usado un Chrysler PT Cruiser. Un coche universalmente conocido por sus defectos y baja calidad, además de una estética que trataba de ser retro, considerada como poco… subjetiva. Imagino que era necesario usar un coche de tracción delantera para la conversión. El frontal y parte de la zaga se conservan, pero en medio ha crecido una especie de tumor.

Una urna de cristal cuya forma imita sin éxito a la de una antigua carroza. Es el complemento ideal para una boda elegante, y sobretodo con mucha clase. Tras unas cortinas de color crema dignas del salón de tu abuela, encontramos un interior digno de una limusina de bajo coste. Asientos de cuero de colores estrambóticos que bien podrían ser de skay, con un bordado en sus respaldos en el que se lee «Exclusive Limo» de forma distinguida.

Sin ir más lejos, una típica limusina Zil de origen soviético es mucho más elegante que esta carroza de pesadilla.

Un mueble bar con copas de champán remata la jugada. Pero no te aconsejamos beber en esta limusina, aunque quieras hacerlo para olvidar su aspecto. Su suelo de espejo con efecto infinito puede multiplicar el efecto del vodka barato en varios órdenes de magnitud. Quizá algunos vean belleza en su tono nacarado, en sus llantas tuning de 17 pulgadas o en los adornos repartidos por la carrocería, que imitan madera esculpida.

Personalmente, me debato entre quemarlo en la hoguera de San Juan o donarlo a un museo de arte moderno. Una obra tan demencial bien merece la apreciación por parte de críticos que valoran en millones de euros cuadros pintados de un color uniforme. Camaradas, sed sabios y casaos en una comitiva de Toyota Land Cruiser esgrimiendo Kalashnikov al aire. Es mucho más patriótico que hacerlo en esta carroza de Anastasia de barrio.

Fuente: Imgur
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