Volkswagen ha presentado ayer en sociedad el lavado de cara de su Passat. Específicamente, del Passat que se construye en Chattanooga, Tennessee para el mercado estadounidense. Y no podrían haber escogido un peor momento para hacerlo, en pleno Dieselgate, un auténtico escándalo en el que se ha demostrado que Volkswagen falseó los test emisiones en sus coches diésel. Sea como sea, Volkswagen tenía programada la presentación del lavado de cara de su Passat, y en Diariomotor tenemos toda la información e imágenes oficiales.
Una estética mejorada y motores más eficientes
El Volkswagen estadounidense es ahora más afilado. Su calandra es ahora más rectilínea y posee en general un aspecto más moderno. El coche de las imágenes equipa el bonito kit R-Line, un extra antes no disponible que consigue imprimir a este coche un carácter mucho más deportivo gracias a unos paragolpes trufados de tomas de aire, llantas de grandes dimensiones y ópticas LED. Tanto los faros delanteros como los pilotos traseros se han modificado, teniendo ahora una nueva firma lumínica y tecnología LED.
En el interior hay un salto cualitativo. Los acabados y ajustes eran uno de los puntos flacos de este Passat estadounidense, y Volkswagen habría trabajado duro para mejorarlos. La instrumentación y el volante son nuevos, como también lo es el equipo de infoentretenimiento MIB II – no confundir con «Men in Black» – compatible con Android Auto, Apple CarPlay y MirrorLink. Este sistema de infoentretenimiento está disponible en dos tamaños de pantalla y es compatible con un control gestual avanzado.
En lo tocante a equipamiento, el Passat estrena amenidades como por ejemplo asientos traseros calefactados y sistemas avanzados de ayuda a la conducción como control de crucero adaptativo o frenada autónoma en caso de accidente inminente. Un detalle que no había visto en otros coches es la frenada automática post-colisión, que evita que nuestro coche ruede o impacte contra otro coche cuando sufrimos un accidente. También dispone de cámaras de visión periférica, tanto trasera como de 360 grados.
La gama de motores americana se compone de un 1.8 TSI de 170 CV como motor de acceso, siendo el tope de gama un 3.6 VR6 de 280 CV, un propulsor casi extinto en Europa. La gama diésel se renueva con un 2.0 TDI de 150 CV, pero está por ver si se le permite a Volkswagen volver a vender motores diésel al otro lado del charco y si estos nuevos motores – ya equipados con inyección SCR de AdBlue – cumplen la normativa americana de emisiones. El precio base del Passat yankee sigue arrancando en sólamente 22.400 dólares.
Fuente: Carscoops
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