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Realidad aumentada, avatares y robots: así es la Industria 4.0 de Mercedes-Benz

¿Cómo se produce un coche? La imagen de una fábrica moderna de automóviles, salvo en contadas ocasiones, es la de una sucesión de líneas de producción, cadenas de montaje que en su mayoría están separadas físicamente de los humanos para evitar su interacción con los robots. La automatización de una línea de producción avanza cada vez más, pero Mercedes-Benz sigue viendo futuro a la labor humana, cada vez más avanzada y productiva gracias a tecnologías como la realidad aumentada; avatares robóticos que imitarán los movimientos de los humanos; y robots que trabajarán codo con codo con los operarios sin riesgo para estos.

Mercedes-Benz nos contaba que su marca está trabajando en la automatización de tareas que hasta ahora solo estaban reservadas para los humanos, de una digitalización completa de todo el proceso, desde el diseño y el desarrollo, hasta la producción final de el vehículo. Tecnologías que ya están revolucionando a la industria, por su flexibilidad, por ganar en eficiencia y productividad, por crear un entorno de trabajo y esfuerzo más apropiado para los operarios, y optimizar la logística.

Esa es la razón que ha llevado a la marca alemana a crear lo que denominan como Industria 4.0, una revisión de las técnicas que se emplean en la producción para aplicar los beneficios de la digitalización en un sistema de producción inteligente.

Para comenzar a probar estas tecnologías, Mercedes-Benz ha creado prototipos de factorías que se erigen en un recinto denominado ARENA 2036, de Active Research Environment for the Next Generation of Automobiles, en Sindelfingen. Recordemos que Mercedes-Benz no es la única marca que está trabajando en este tipo de tecnologías. Hace unos días conocíamos la propuesta de futuro para las fábricas de Audi, que también se basaba en algunas soluciones de realidad virtual aumentada como las propuestas por Mercedes-Benz. Estas tecnologías también pretenden redundar en el acortamiento de los ciclos de vida de un automóvil, si se agiliza la producción de un vehículo y el proceso de adaptación de una fábrica mediante la digitalización, también podrán lanzarse vehículos nuevos en periodos de tiempo inferiores.

* Colaboración entre humanos y robots. Por cuestiones de seguridad, los robots, generalmente brazos robóticos capaces de ejercer la fuerza suficiente para levantar toneladas de peso y suficiente sensibilidad para mover un huevo sin romperlo, trabajan separados físicamente de los humanos. La utilización de robots con sensores capaces de detectar a los humanos que trabajan junto a ellos ayudará en el ensamblado de componentes como las cajas de cambio. Mercedes-Benz también está probándolo en la instalación de baterías en híbridos.

* Conducción autónoma. Los vehículos capaces de trasladarse de un punto a otro de las instalaciones sin intervención de un humano pretende revolucionar la logística de la producción, por ejemplo para el transporte de suministros. El operario puede solicitar suministros a un robot (o a un coche autónomo), transmitir las coordenadas desde un tablet mediante wi-fi, y que estos suministros lleguen a su línea en un tiempo récord.

* Avatares y realidad aumentada. Otro de los grandes avances pasará por replicar los movimientos de un humano, en un robot, de manera que puedan llevarse a cabo procesos que requieren gran precisión sin el estrés y la fatiga que estos pueden conllevar en los operarios. Esta tecnología ha dejado de ser ciencia ficción. Según Mercedes-Benz ya ha comenzado a aplicarse en el desarrollo del nuevo Mercedes Clase E.

* El aprendizaje de los robots. Mercedes-Benz también estudia cómo los avatares y los robots pueden replicar los movimientos humanos y a su vez llegar a un aprendizaje que permita que estos robots ejecuten las tareas sin intervención humana, por ejemplo en los últimos ajustes del ensamblado de un vehículo.

* Realidad aumentada. La realidad aumentada quiere permitir que los operarios tengan a su alcance información, dibujada en la superficie de unas gafas transparentes, relevante en su trabajo. En el Mercedes Clase E ya habría empezado a utilizarse en tareas de control de calidad, como la inspección de algunos componentes del chasis.

* La impresión 3D. Pensad que muchas piezas pueden imprimirse en tres dimensiones, de manera que una misma máquina puede producir piezas muy diferentes sin adaptación previa, únicamente recibiendo los detalles digitalizados de la pieza que ha de construirse. Esta tecnología es especialmente útil para agilizar y reducir el coste de la producción de prototipos.

Fuente: Mercedes-Benz
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