Imagina esta escena. Suena la radio de un coche de policía y el siguiente mensaje: «pedimos refuerzos, perseguimos a un Honda Civic Type-R que ha sido identificado a 240 km/h, su matrícula es la siguiente: corazón, flamenca con vestido rojo, caquita sonriente y carita llorando de risa». Imagina un mundo en que las matrículas pudieran personalizarse con emojis, nada de códigos de letras y números. Menuda locura, ¿no crees?
Esa ha sido la idea que ha tenido Honda para su broma del April Fools’ Day 2016, el equivalente al Día de los Santos Inocentes que en España celebramos el 28 de diciembre, y que en el mundo anglosajón se celebra el 1 de abril.
Su idea no ha sido otra que instalar en el más deportivo de la gama Honda Civic una matrícula con emojis, amparándose en una idea que según diferentes falsos estudios calaría hondo en sus compradores. De hecho Honda asegura que un 97% de los clientes con menos de 30 años preferirían coches con emojis en sus matrículas que el habitual código de números y letras.
Por suerte, para todos, esta locura jamás llegará a verse en la calle. O eso esperamos.
La esencia de una matrícula es que pueda identificar unívocamente a un coche. Una matrícula con emojis lo permitiría, pero nos olvidaríamos de que también es esencial que ese código de letras y números sea sencillo de registrar, y baste con mirarlo un instante para memorizarlo y anotarlo.
Un mundo con emojis en las matrículas quizás sería más divertido, pero no más seguro.
Fuente: Honda
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