ESPACIOS
Cerrar CERRAR
Entrada

3 MIN

¿Es justificable un precio de 475.800 euros para un Audi Sport Quattro del año 1986?

Los Grupo B son los coches de rallyes más especiales jamás creados, sin duda alguna. Y si los Grupo B son especiales, sus versiones de calle – creadas con el propósito único de homologar las de competición – son aún más especiales. Mitos de cuatro ruedas, que sólo unos pocos afortunados poseen. Ya sabéis la enorme especulación a la que está sujeta el mundo de los coches clásicos. Los Audi Sport Quattro no se escapan a ella. En la última subasta de RM Sotheby’s, se han pagado 475.800 euros por una unidad.

De las 214 unidades producidas, sólo 161 unidades estaban homologadas para su uso en carretera.

¿Nos hemos vuelto locos? La burbuja de la especulación parece no tener fin, y este Audi Sport Quattro es la evidencia. El coche salió de fábrica el 15 de abril de 1986, y fue en su momento una de sólo cinco unidades exportadas a Reino Unido, a pesar de no tener volante a la derecha. Tiene sólamente 32.267 millas en su odómetro – poco más de 50.000 km – y está en perfecto estado mecánico. En los años 80 se reemplazó su bloque de aluminio por un bloque de acero y ha sido meticulosamente mantenido por talleres especializados.

Es una unidad impecable, de ello no hay duda. Todo su historial es conocido, y se ha vendido con toda su documentación y herramientas originales. Además, en sus asientos deportivos con cinturones Sabelt opcionales, de cuatro puntos. Sí, por supuesto que llama la atención un precio de prácticamente medio millón de euros y orígenes británicos – es un coche que nunca se vendió con volante a la derecha. Al tener más de 25 años, es posible su exportación a Estados Unidos, hecho que también ha elevado su valor.

Un sistema ABS con cuatro canales y un pilotaje agresivo eran la solución a su tendencia al subviraje.

Pero sigue siendo un espectacular ejemplar. Pintado en color rojo, sus llantas Ronal blancas están en perfecto estado y su furiosa mecánica late con fuerza. Su cinco cilindros turbo de sólo 2.133 cc de cubicaje desarrolla nada menos que 306 CV, posibles gracias a la sobrealimentación por un turbo KKK K-27 y la lubricación por cárter seco, así como una inyección mecánica Pierburg-Bosche. Toda la potencia pasa al suelo a través de las cuatro ruedas, previo paso por una caja manual de cinco relaciones.

El reparto de potencia es completamente ajustable por parte del conductor, en tiempo real. La diferencia de los Audi Sport Quattro con respecto a los Audi Quattro Coupé con los que Audi se estrenó en el Grupo B era su batalla. Los Sport Quattro tenían una batalla 32 cm más corta, y eran aún más potentes. Estaban notablemente ensanchados, y tenían piezas de otros modelos de la gama, como el parabrisas de un Audi 80. Fueron construidos por Baur, un especialista carrocero que por aquella época también hacía descapotables con base BMW.

Es prácticamente seguro que Audi perdía mucho dinero en cada unidad fabricada. Con respecto a los Ur-Quattro, adelgazaba 180 kilos gracias al uso de materiales exóticos, como Kevlar, plástico reforzado con fibra de carbono o aluminio.

Fuente: autoblog.gr
En Diariomotor:


Cargando...