ESPACIOS
Cerrar CERRAR

¿Te atreverías a rodar descapotado a 350 km/h? El Brabus Rocket 900 Cabriolet hace realidad tus sueños más delirantes

Todos estamos más o menos de acuerdo en que los descapotables son coches de lo más interesantes. Para muchos, es el coche de disfrute perfecto, aumentando nuestra sensación de comunión con la máquina mediante la ausencia de techo. Los cabrios nos gustan, pero rodar a altas velocidades sin capota puede ser todo un suplicio. Especialmente si estamos hablando de los 350 km/h que el Brabus Rocket 900 Cabriolet es capaz de alcanzar. Se trata del cabriolet de cuatro plazas más rápido del mundo, y posiblemente el secador de pelo más caro que puedes adquirir en estos momentos. Toda una oda al exceso.

La base de este Brabus Rocket 900 Cabriolet es, como no podía ser de otra manera, el Mercedes-AMG S 65 Cabrio, el descapotable más caro y potente fabricado por Mercedes-Benz. No es un coche precisamente lento de serie: su motor 6.0 V12 Biturbo desarrolla 630 CV y es capaz de alcanzar los 100 km/h en sólamente 4,1 segundos. La preparación de Brabus invierte mucho tiempo y dinero en una mejora mecánica significativa: los artesanos de Bottrop elevan su cilindrada hasta los 6,3 litros, e instalan una nueva pareja de turbos de alto rendimiento. También modifican toda la fontanería de admisión, e instalan una nueva línea de escape.

Brabus ha instalado un diferencial autoblocante en el eje trasero, con un tarado al 40%, imprescindible para digerir la «caballería».

Las modificaciones continúan con una profunda reprogramación de la centralita electrónica, unos nuevos pistones forjados – con bielas de acero – y recubrimientos con pan de oro para mantener a raya el calor generado por este monstruo mecánico. La transmisión automática de 7 relaciones también recibe refuerzos, y mediante electrónica se limita el par máximo generado a 1.200 Nm. Una cifra monumental, pero inferior a los 1.500 Nm que el motor generaría sin ser «capado» por la ECU. La potencia máxima del motor pasa de sus nada desestimables 630 CV a de serie a unos desquiciantes 900 CV – dirigidos uno tras otro al sufrido tren trasero.

El resultado es un 0 a 100 km/h de 3,9 segundos – nada mal para un tracción trasera de 2.225 kilogramos de peso en vacío – y una velocidad punta de al menos 350 km/h. Una cifra impresionante si tenemos en cuenta que no es un coche con una aerodinámica brillante, a pesar de que Brabus afirma que ha desarrollado su kit de carrocería en el túnel de viento. Entendemos que estos 350 km/h se consiguen con el coche capotado – no querría viajar a más de 300 km/h en las plazas traseras de ningún vehículo sin capota. Hay otros factores que contribuyen a esta gigantesca punta, como una suspensión rebajada en 15 mm adicionales.

Sólo tu chequera limita las opciones de personalización ofrecidas por Brabus, tanto dentro como fuera del coche.

El sistema de frenado también ha sido actualizado, con frenos carbonocerámicos de enormes dimensiones. Las llantas de la unidad aquí expuesta son de 21 pulgadas, con neumáticos de alto rendimiento en medidas 255/35 ZR 21 para el eje delantero y 295/30 ZR 21 en el tren trasero. Si quieres «fardar» aún más, puedes encargar unas llantas Monoblock en 22 pulgadas de diámetro. El kit de carrocería es de fibra de carbono e incrementa el aspecto agresivo de este cabrio, que no descuida un interior lujoso y refinado, con tapizados – si cabe – aún más opulentos. El velocímetro está tarado hasta los 400 km/h.

Cargando...