Hoy era un día muy especial, especialmente para Ferrari. Esa no sería la razón por la cual su stand del Salón de París estaba lleno a rebosar, puesto que eso es habitual en un evento internacional de este calibre, pero sí la culpable de que esta fuera una de las presentaciones más emotivas de los últimos años. Sé que mis compañeros, allí presentes, os hablarán más de todo esto. Pero no queríamos retrasar más el momento de presentaros las primeras imágenes de la joya que allí se presentaba y la que, aunque parezca mentira, tuvo que compartir protagonismo con el hombre que durante más de dos décadas ha dirigido el porvenir de esta marca, el Ferrari 458 Speciale A, con A de Aperta.
Sí, señores, aún habrá una forma más emocionante de disfrutar de un Speciale, a cielo abierto. 608 CV, 50 kilitos más que en un Speciale Coupé, por culpa del sistema de apertura y cierre de capota y los refuerzos estructurales que exige un descapotable pensado para la calle, pero también para los circuitos. 0 a 100 km/h en 3 segundos tienen la culpa.
Detalles deportivos por doquier.
Mucho ojo a esta cabina de conducción.
El protagonismo compartido entre el hombre y la máquina, Luca di Montezemolo y su último cavallino.
Y una certeza. Jamás ha habido una bestia tan pura de Ferrari, descapotable y con un sistema de apertura y cierre de capota tan sofisticado.
Lo dicho. En los próximos días os seguiremos hablando del Ferrari 458 Speciale A. No os quepa la menor duda.
Fotografía: David Clavero
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