ESPACIOS
Cerrar CERRAR
Competición

4 MIN

Cascos históricos: Martin y Alex Brundle

Martin Brundle es uno de los elementos más populares del paddock de la Fórmula 1 actual. Comentarista de grandes premios de forma ininterrumpida desde 1997 con su debut un par de años antes, el británico es una figura locuaz, sin ningún tipo de problema a la hora de decir lo que piensa. Aún así, su formación no es periodística sino que llegó a las cabinas de comentaristas proveniente de las cabinas de los coches de carreras. A fin de cuentas, Brundle fue piloto entre los años 80 y 90, con un diseño de casco reconocido por los aficionados de la época.

El diseño del casco del piloto de Norfolk no fue siempre igual y en sus primeros años compitió con un casco completamente amarillo. Así fue como luchó con Ayrton Senna en la Fórmula 3 británica en 1983. Pero a su paso en la Fórmula 1 con el equipo Tyrell al año siguiente, Brundle decidió hacer un cambio de imagen. A fin de cuentas, el casco amarillo acabaría siendo mucho más popular en manos -o mejor dicho, cabeza- del agresivo Senna, que además era más próximo al color en términos temáticos.

Al final, la Fórmula 1 tenía aún entonces un elemento relativamente conservador y al estar el amarillo en la bandera de Brasil, país de Senna, cualquiera diría que tenía mucha más lógica verle en ese casco que en el de Martin Brundle. Este último tomó la decisión de seguir el camino marcado por la mayoría de pilotos y pasó a usar los colores de la bandera británica en su casco. De forma parecida a tantos otros pilotos de la época, el color básico acabó siendo el blanco.

La mayor parte del casco de Brundle lucía este color, a excepción de tres líneas que bordeaban todo el casco por debajo de la visera en la parte frontal y a la altura de esta en el lateral y por detrás. Las líneas superior e inferior eran rojas, siendo la central azul y todas ellas coronadas con un sutil marco dorado. En la parte superior, el tradicional espacio de Marlboro se aseguraba que el resultado final no fuera excesivamente básico, con los logos de la marca y las líneas rojas.

Con el tiempo, el piloto británico perdió el apoyo de Marlboro y eso «limpió» el diseño de su casco. Año tras año, las líneas laterales fueron estilizándose hasta que en 1995 dejaron las formas rectas y adoptaron unas sensuales curvas que le dieron un aire más moderno al viejo diseño creado una década antes. También añadió a la vacía parte superior una «B» mayúscula con un diseño propio, en color azul, en alusión a la inicial de su apellido. Finalmente, en 1996 añadió una «tira» dorada en el tradicional espacio Marlboro pero para otra tabacalera: Benson & Hedges.

Tras dejar la Fórmula 1 a finales de 1996, en sus subsecuentes apariciones en el mundo de la resistencia, el diseño de casco usado fue siempre el mismo de 1995 aunque sin los logos de Ligier. Llegado un punto, su hijo Alex Brundle empezó su carrera profesional y usó su propia versión del casco. No hubo muchos cambios pero sí tomó más protagonista el color rojo de la parte inferior, volviéndose además prácticamente naranja. Adicionalmente, el espacio que habían ocupado Marlboro y Benson & Hedges en el casco de su padre tomó ese color rojo anaranjado..

Desde entonces, el diseño de los Brundle se ha lucido por partida doble ya que Martin llegó a competir incluso en las 24 horas de Le Mans en 2012 junto a su hijo -y a Lucas Ordóñez-. El padre adoptó el diseño del hijo hasta el punto que en ocasiones era difícil saber quien estaba al volante del coche. Alex Brundle sigue usando el casco a día de hoy y Martin Brundle hace lo propio cuando se pone a los mandos de algún coche de Fórmula 1 como parte de su trabajo en Sky Sports F1. Sin duda, un casco que ha cruzado las barreras del tiempo y que ha estado en activo en cuatro décadas distintas.

En Diariomotor Competición | Cascos Históricos

Cargando...