Viaje a los bajos fondos de Indianápolis: en el reino de los ciegos nunca gana un Andretti
Una carrera centenaria como las 500 Millas de Indianápolis está plagada de leyendas y supersticiones. Y una de las más conocidas es la maldición de los Andretti, también recordada como la maldición del beso de Andy Granatelli por el beso que le plantó en la mejilla a Mario el propietario del coche con el que ganó la edición de 1969. Fue su única victoria en 29 participaciones y la única de toda la familia en 73 apariciones como pilotos