Ofende a los puristas de BMW y Toyota con este M3 E46 con motor 2JZ-GTE de origen japonés y 570 CV

Los puristas echarán las manos a la cabeza. Los puristas del BMW M3 E46 te dirán que has arruinado el carácter del coche instalando en sus entrañas un motor turbo de un fabricante japonés. Los puristas de Toyota te dirán que un propulsor tan legendario como un 2JZ-GTE nunca debería estar en un coche que no fuera un Toyota. Y sin embargo, este frankenstein «del eje del mal» es uno de los deportivos más interesantes actualmente a la venta en Reino Unido – concretamente en eBay. Es un BMW M3 E46 del año 2004, con carrocería descapotable. Y no, no era un coche adquirido con el motor roto, o averiado.

Este coche fue adquirido en 2014, en perfecto estado de funcionamiento y con su motor original. Sin embargo, el propietario – que anteriormente había tenido un Subaru Impreza modificado – echaba de menos las sensaciones de un motor turboalimentado. Es por ello, que decidió contratar los servicios de M&M Engineering, que sacaron el S54 atmosférico de sus entrañas, e instalaron un pesado 2JZ-GTE, originalmente equipado en un Toyota Supra A80. Este motor fue después convertido a un único turbocompresor Borg Warner, y modificado hasta la médula con el objetivo de aumentar su potencia máxima hasta los 572 CV.

En la transformación del coche se han invertido nada menos que 35.000 libras esterlinas, aproximadamente.

Para ello el motor recibió una nueva admisión K&N, inyectores de 800 cc, nuevas bombas de combustible, una línea de escape completamente artesanal, intercooler, rodamientos reforzados para el ciguëñal y una nueva centralita programable. El motor tenía unos 160.000 km en sus componentes internos, y fue reconstruido de forma meticulosa antes de ser montado en el BMW. Estos motores son duros como rocas, y apenas necesitan refuerzos para soportar potencias superiores a los 600 CV. La conversión ha sido llevada a cabo por uno de los mejores especialistas de Reino Unido y en ella no se ha escatimado un penique.

La caja de cambios sigue siendo manual, y ahora tiene un nuevo embrague bimasa preparado para soportar potencias de hasta 800 CV. La suspensión emplea coilovers ajustables firmados por D2 y en el eje trasero se ha montado un autoblocante mecánico Wavetrac. Las pinzas de freno tienen ocho pistones y monta llantas de BMW M3 CSL originales, con neumáticos Yokohama de corte deportivo. El interior se ha mantenido fiel al BMW de partida, aunque se han retapizado los asientos con el mismo cuero que usan los Bentley. El toque final lo ponen un pomo y un freno de mano elegantemente mecanizados en acero inoxidable.