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¿Es un pájaro? ¿Es un avión? No, es el nuevo dron autónomo de la Policía Nacional que te perseguirá sin piedad

Fue hace tiempo cuando los cuerpos de seguridad decidieron surcar los cielos en busca de vigilar y proteger, pero ahora han querido ir un paso más lejos. Y es que la Policía Nacional ha sido obsequiada desde China con el Vehículo Aéreo Autónomo -AAV, según las siglas en inglés-, o como ellos prefieren llamarlo, el «megadron». Detrás de este nombre más propio de una película de ciencia ficción se esconde un dron tan real como la vida misma, autónomo, que pesa 600 kg, que es capaz de alcanzar una velocidad de 130 km/h y que llega dispuesto a perseguirte sin piedad ninguna.

Pese a que el concepto y funcionamiento es similar al de un dron normal y corriente, lo cierto es que este modelo procedente de la empresa china EHang pretende ser mucho más que un dispositivo de grabación. Además de sus capacidades aéreas y de su peso, el EHang 216, nombre del modelo que ha recibido la Policía, cuenta con la posibilidad de cargar hasta 220 kilos, siendo ideal para operaciones de rescate.

Megadron Policia Nacional 1

El «megadron» o cómo la Policía Nacional surcará los cielos…desde el suelo

Tal y como indica su nombre científico, el EHang 216 es un vehículo autónomo, por lo que no requiere de la presencia de un piloto en su interior pese a tener capacidad para dos ocupantes. Puede realizar despegues y aterrizajes verticales, así como ofrecer un total de 35 kilómetros de autonomía. Mide 5,6 metros de largo y cuenta con tecnología 5G y LTE para transmitir información directamente al móvil o al centro de mandos.

Gracias a sus contenidas dimensiones y a su mayor agilidad en según qué escenarios, el «megadron» es ideal para llevar a cabo operaciones en las que un helicóptero al uso se sentiría más torpe por su envergadura. Y es que ese es uno de los principales propósitos del EHang 216 que ha recibido la Policía Nacional, suplir a sus BO-105 y EC-135 cuando las circunstancias no resultan óptimas.

Y es que aunque su destino final sea el de vigilar las carreteras con suma facilidad, de momento sus funciones van a ser las de acceder a zonas contaminadas, entrar en espacios aéreos reducidos o peligrosos y, como ya hemos mencionado, realizar maniobras en lugares imposibles para un helicóptero puro y duro.

Sea como fuere, lo que está claro es que este cambio de era automovilístico también está afectando a otros medios de transporte, y prueba irrefutable de ello es el «megadron». La vigilancia del mañana, la forma de sancionar y la forma de perseguir a los malechores también está en proceso de transición, y solo estamos ante el comienzo.

Megadron Policia Nacional 3

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