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La furgoneta del futuro, según Ford, no necesitará conductor... y es una auténtica caja de zapatos

Hemos de asumirlo. El reparto de mercancías y paquetería, más temprano que tarde, se llevará a cabo con drones que nos dejarán el paquete en el jardín, o en la terraza; o llegará hasta nuestro domicilio en vehículos autónomos que pasearán por las ciudades sin conductor. Ford ya vislumbra un futuro en el que sus coches comerciales no necesitarán conductores y en el que el reparto de paquetes se llevará a cabo mediante la combinación de ambas tecnologías, la de los drones autónomos y la de los coches autónomos, sin conductor. Y su idea del futuro de reparto de mensajería es una furgoneta que lleva al extremo el concepto de caja de zapatos.

Ford imagina el futuro del reparto de paquetes y mensajería mediante la combinación de furgonetas autónomas y drones autónomos

El concepto Ford Autolivery es una idea de los empleados de Ford para imaginar el reparto del futuro. Este proyecto, que se presenta en el Mobile World Congress en Barcelona estos días, se enclava en la idea de la Ciudad del Mañana de Ford. Aunque Ford está invirtiendo grandes esfuerzos de desarrollo en el coche autónomo, la idea que refleja este prototipo aún está alejada de lo que veremos en la calle en los próximos años.

Según Ford, su objetivo es lanzar furgonetas autónomas de nivel 4, que serán capaces de circular sin supervisión en prácticamente cualquier carretera, hacia el año 2021.

En la automatización del reparto de mercancías, el reto más complicado que deben resolver las empresas de logística se encuentra en la entrega final, en los últimos 15 metros

Si esas furgonetas siguen aumentando su nivel de autonomía, hasta llegar a la autonomía total, en la que no será necesaria la presencia de un conductor, o un repartidor supervisando los trayectos, el problema llega con la entrega final. Sin conductor, ni repartidor, ¿quién llevará el paquete hasta la puerta de su casa?

Esa es precisamente la problemática que pretende resolver la idea de los drones autónomos que propone el concepto Autolivery y de cómo resolver el reto de los últimos 15 metros. Lo creas, o no, para las empresas de automóviles y logística que están trabajando en la automatización completa del proceso de entrega de mercancías, el mayor problema está en la entrega final, en los últimos 15 metros. Un reto aún más difícil de resolver que la propia conducción autónoma de un coche. Y es ahí donde los drones podrían ser muy útiles para proceder a la entrega final.

Ahora bien, ¿serán la automatización de los transportes de mercancías, la necesidad de un transporte práctico y eficiente, y el coche autónomo, las razones que impidan que veamos por nuestras calles furgonetas bonitas? Esperemos que no.

Fuente: Ford
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