Porque es uno de los Land Rover Defender que participaron en Spectre. Un coche único usado en una producción cinematográfica de primer nivel, no sólamente un simple Land Rover Defender preparado para atacar los enormes bordillos del barrio londinense de Kensington. Los productores de Spectre pensaron que sería una buena idea que los «malos» usaran varios todoterrenos de aspecto amenazador para atravesar los Alpes, y encargaron a Special Vehicle Operations (SVO) – el preparador oficial de Jaguar Land Rover – diez unidades muy especiales del ya extinto Land Rover Defender, un icono todoterreno.
Special Vehicle Operations produjo los vehículos, pero para su preparación off-road, recurrió a Bowler. Bowler es un especialista en todoterrenos de competición, construidos sobre base Land Rover. Ellos fueron quienes transformaron los Defender en auténticas bestias todoterreno, de aspecto agresivo, bautizados como Land Rover SVX Concept. No fue el único vehículo suministrado para la película por Jaguar Land Rover, ya que también hicieron acto de presencia los Range Rover Sport SVR y el espectacular Jaguar C-X75, usado en persecución por las calles de Roma junto a un precioso Aston Martin DB10.
Aunque no puedas comprar el Jaguar C-X75 que se usó en Spectre, sí puedes hacerte con uno de los diez Land Rover Defender SVX Concept fabricados para la película. Varias de las diez unidades fueron destruidas durante el rodaje, y sólo ocho sobreviven en manos privadas. El propietario de esta unidad la adquirió directamente a Bowler tras el rodaje, y sólo ha recorrido desde entonces 234 kilómetros. Está prácticamente nueva. Ya que esta unidad en concreto fue usada para escenas de conducción y planos cercanos, sobrevivió sin problemas – y sin magulladuras o golpes – al duro y destructivo rodaje.
Pintada en color Santorini Black, ha sido preparada a conciencia, con enormes neumáticos todoterreno de 37 pulgadas – atornillados a la llanta de competición – y multitud de mejoras en la suspensión. Lleva amortiguadores Bilstein Rally, brazos de suspensión reforzados y una jaula antivuelco completa, muy bien camuflada en su estructura. El motor también ha sido actualizado: el diésel de cuatro cilindros y 2,2 litros pasa de sus 122 CV de serie a 185 CV, con un par motor que ahora llega a los 500 Nm. En el interior también cuenta con baquets Recaro con cinturones de cuatro puntos e instalación para un freno de mano hidráulico.
Exteriormente, la agresividad de sus neumáticos se complementa con una enorme baca con iluminación de alta potencia, un paragolpes delantero con cabestrante, cuerdas y molduras de acero negro para la parte inferior de las puertas.
Fuente: RM Auctions
Land Rover Defender 
