Porsche ha hecho algo muy grande devolviendo a la gama 718 los motores atmosféricos. Muchos petrolheads daban por perdida la pasión por los motores atmosféricos, y daban por perdida la miel que Porsche les había puesto en los labios con el Cayman GT4 de la anterior generación. Pero Porsche no solo ha lanzado un nuevo Porsche 718 Cayman GT4, lo ha acompañado de un 718 Boxster Sypder con el mismo motor, y ha lanzado el mismo motor, ligeramente descafeinado, en los Porsche 718 GTS. Y ahora, nos los ofrece con cambio automático PDK de forma opcional. Y desde Diariomotor te pedimos que no lo hagas. Te cuento.
Sobre el papel, la decisión de Porsche de ofrecer su cambio PDK de doble embrague en la familia 718 con motores de seis cilindros es impecable. No solo el cambio es fantástico, si no que incrementa las prestaciones de los coches – el 0 a 100 km/h se reduce en hasta 0,5 segundos en los GT4 – reduce el consumo y permite tiempos de vuelta más ajustados en circuito. Muchos propietarios entrarán a circuito con estos coches. El cambio PDK es un extra de 3.713 euros en los Porsche 718 GTS, y un extra de 3.224 euros en los GT4 y Spyder, aún más pasionales.
En otros modelos de la gama Porsche existe opción manual – es decir, en los Porsche 911 – sin coste, siendo el cambio automático la opción por defecto. En el caso de los 718, hay que hacer un esfuerzo económico y consciente para optar por el cambio PDK. Dejando a un lado este pequeño pero no trivial detalle, ningún verdadero petrolhead debería tener un 718 de seis cilindros con cambio automático. A riesgo de sonar ludita y de sonar retrógrado, puede que sea la última oportunidad que tengas de comprar un deportivo tan especial con tres pedales bajo el volante.
Galería de fotos del Porsche Cayman GT4
A los cambios manuales les quedan apenas años de existencia. Los pocos coches deportivos que los equipan están siendo aniquilados sin compasión por las normativas anticontaminación, que todo lo transforman en coches híbridos o electrificados. Para mayor escarnio, no pocos propietarios de coches pasionales – como pueden ser los Ford Mustang o el Porsche 911 – están optando más y más por la versión automática. Por supuesto que son cambios eficaces, rapidísimos y cómodos. Pero por muy buenos que sean, jamás nos implicarán en la conducción como un cambio manual.
No me cansaré de repetirlo hasta la extenuación. Para mí esto es una verdad absoluta, una convicción personal inamovible. Los fabricantes de coches se mueven por la rentabilidad, no por los desvaríos de unos cuantos periodistas del motor. Por eso, es mi responsabilidad insistir: si estos fantásticos deportivos se venden en su gran mayoría con cambio automático, Porsche dejará de ofrecerlos con cambio manual. Esto ya ha ocurrido en coches como los BMW M5, los Chevrolet Corvette o compactos deportivos como el nuevo CUPRA León. El mercado es el que manda.
Pero no vamos a quedarnos aquí. Te vamos a dar otro motivo de peso para que tu próximo GT4/GTS/Spyder se maneje con tres pedales. El carácter especial y exótico de un Porsche 718 Cayman GT4 con cambio manual en el mercado actual se acentuará aún más en un futuro. Si en algún momento quieres vender tu coche, ten por seguro que podrás pedir más dinero – y no poco más – que si el coche fuera automático. Es una cuestión de escasez, de oferta y demanda. Por último, porque la diversión no se mide en un 0 a 100 km/h más rápido ni en un tiempo de vuelta un segundo más rápido.
Se mide en la sonrisa que te pone en la cara un punta tacón perfecto, en el click-clack de un cambio tradicional preciso y rápido. En la satisfacción de hacer las cosas por uno mismo, de trabajarse la diversión, de huir de la gratificación instantánea y fácil.
Porsche 718 Cayman 
