Porsche ha escuchado las plegarias de los puristas y les ha hecho caso. El fabricante alemán de deportivos acaba de presentarnos el Porsche 911 que todos los puristas deberían comprar: por fin el Porsche 911 (992) está disponible con caja de cambios manual. Una caja manual de siete relaciones que de momento, se puede encargar en las versiones Carrera S y Carrera 4S de tracción integral y 450 CV de potencia. Por el momento no se puede encargar asociada a la versión Carrera de acceso, pero siendo Porsche, todo se andará. Veamos qué nos ofrece este nuevo cambio manual.
Para empezar, es un cambio manual de siete relaciones. El Porsche 991 ya tuvo un cambio manual de siete relaciones, pero no estuvo disponible en el mercado español. En la nota de prensa que Porsche ha mandado no se hace referencia explícita a su disponibilidad en el mercado español, pero se habla de una completa disponibilidad para el mercado común europeo. Centrándonos en este cambio manual, en los Carrera S y 4S está asociado en exclusiva a unidades con el paquete Sport Chrono y un sistema PTV (Porsche Torque Vectoring).
Este sistema distribuye el par entre las ruedas traseras combinando la aplicación selectiva de los frenos y un diferencial con bloqueo mecánico controlado electrónicamente. Este cambio manual también cuenta con una función de punta-tacón automática – que es posible desactivar – que nos permitirá disfrutar aún más de una conducción deportiva. En cuanto a sus prestaciones, el Porsche 911 Carrera S con cambio manual hace el 0 a 100 km/h en 4,2 segundos, 0,5 segundos más lento que la versión con caja de cambios PDK de doble embrague y ocho relaciones.
Su velocidad punta es idéntica a los 308 km/h de la versión automática. Algunos podrían pensar que este cambio es un paso atrás en cuanto a prestaciones y eficacia. Pero en verdad, ¿cuántas veces vas a cronometrar el 0 a 100 km/h? ¿Va a ser un dato relevante en algún momento? No hace falta que le des vueltas, la respuesta es no. Porsche ha desarrollado esta integración del cambio manual en el 911 porque los puristas se lo han pedido, y ahora son esos puristas los que tienen que responder, elegiendo esta versión frente a la automática.
Nos quejamos constamente de que los fabricantes de coches ya no fabrican deportivos manuales, pero la realidad es que han dejado de fabricarlos porque el grueso de clientes termina comprando las versiones automáticas. Hay una expresión anglosajona de difícil traducción que aplica perfectamente a esta situación: «put your money where your mouth is». Es decir, que tu decisión de compra esté de acuerdo con aquello que pregonas. No seas un hipócrita, ¿qué hay más emocionante que pilotar un deportivo de verdad con tres pedales?
Y si aun no estabas del todo convencido, la versión manual no solo es 45 kilos más ligera que la PDK, si no que cuesta exactamente lo mismo que la automática.
Porsche 911 
