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Porsche nos presenta sus 5 coches más ligeros: el más liviano, el 909 Bergspyder, no llega a 400 kg

Porsche tiene una serie de vídeos en su canal de YouTube dedicados a hacer rankings bastante curiosos, de esos que cualquiera de los petrolheads que pululamos por el mundo disfrutamos cada segundo. Condensado en sólo unos minutos, nos han enseñado cuáles son sus modelos de producción más escasos, los que tienen los alerones traseros más grandes, cuáles han sido las mejores creaciones del departamento Porsche Exclusive, los que mejor suenan -algo más subjetivo- o sus cinco coches más importantes en competición. Ahora es el turno de descubrir cuáles son los cinco Porsche más ligeros de la historia y, como podréis intuir, todos son de épocas pasadas, tiempos en los que los coches eran genialmente sencillos.

El precio para tener coches más seguros, más rápidos, más estables, etc. se paga en kilos. La multitud de sistemas de un coche actual incrementa el peso enormemente respecto a un modelo homólogo de hace varias décadas. Dicho de otra forma: un 991.2 GT3 RS es un coche ligero para los estándares modernos, pero si lo comparamos con sus antepasados más remotos tiene un claro sobrepeso. Por supuesto, el 911 GT3 RS no está entre los Porsche más livianos de la historia… Pero, ¿cuáles son?

5. Porsche 911 Carrera RS 2.7 Sport

Uno de esos antepasados primigenios es el 911 Carrera RS 2.7, uno de los 911 más cotizados en la actualidad, una pieza de leyenda que luce en su zaga uno de los alerones traseros más famosos del mundo. Aquel coche apenas pesaba 1.075 kilos (casi 400 kg menos que el actual GT3 RS) y ni siquiera está entre los cinco Porsche más ligeros de la historia. Sí lo hace su versión de competición, el 911 Carrera RS 2.7 Sport, que ahorraba 100 kg respecto a la versión Touring gracias a una dieta obsesiva: asientos Recaro aligerados, parachoques y capó motor en fibra de fibra de vidrio ligera, menos material insonorizante, además de la eliminación de multitud elementos prescindibles como los asientos traseros, el reloj del cuadro de instrumentos, el parasol del pasajero o las ventanillas eléctricas.

Al final, el peso del 911 RS 2.7 Sport se quedaba en sólo 975 kg, que eran movidos por un motor de 210 caballos.

4. Porsche 906 Carrera 6

Una cifra que le sitúa en la báscula por detrás del Porsche 906 Carrera 6, un coche de competición con 210 caballos y puertas tipo alas de gaviota, cuya construcción en fibra de vidrio le permitía quedarse en 675 kilos. Esta cifra era además una importante reducción respecto a su predecesor, el 904, que estaba construido en acero.

3. Porsche 356 SL

En el podio de esta competición, la medalla de bronce va para el Porsche 356 SL (Sport Leicht). Obra de Ferry Porsche, este coche no sólo era una versión coupé del que fue el primer modelo producido en serie de Porsche, el 356, sino todo un ganador. Fue el primer Porsche que ganó en su categoría de Le Mans en 1951; apenas contaba con 70 caballos de potencia pero su carrocería de aluminio lo hacía muy ligero: sólo 640 kilos.

2. Porsche 718 Formel 2

¿Cómo es posible seguir reduciendo el número anterior? ¿Acaso no es un peso pluma el 906? Lo es, pero el Porsche 718 Formel 2 es tan pequeño que necesariamente ha de ser ligero. Con apenas 90 cm de altura, este monoplaza de Fórmula 2 montaba un motor bóxer de cuatro cilindros y 1.496 cm³ con 152 CV de potencia, más que de sobra para mover unos exiguos 456 kilos de peso. Resulta impresionante pensar en una relación de 3 kg/CV en el año 1959.

1. Porsche 909 Bergspyder

Después de haber hecho cábalas con modelos y años, quizá pocos hubiéramos podido imaginar hasta qué punto es ligero el Porsche más ligero de la historia. El Porsche 909 Bergspyder es la máxima expresión de la ligereza, un portento de ingeniería con soluciones de vanguardia en su época. La obsesión por reducir el peso fue tal que el piloto puede ver perfectamente desde su posición el chasis tubular y la carrocería. Érase una vez un asiento a un chasis pegado.

Con 275 caballos, el Porsche 909 Bergspyder era una bomba que sólo tenía que desplazar 384 kilos

En el 909 Bergspyder la carrocería era de plástico, el chasis estaba construido en aluminio y los discos de freno son de berilio (un metal mucho más ligero aún que el aluminio). En posición central, pegado a la espalda del piloto, se sitúa un motor de ocho cilindros, dos litros de cubicaje y la friolera de 275 caballos. Sí, friolera, pues el coche apenas pesa 384 kilos. ¿Alguien dijo ligereza?

Fuente: Porsche
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