ESPACIOS
Cerrar CERRAR

Husqvarna Svartpilen 701 a prueba, todos los detalles e impresiones de conducción: una moto scrambler muy diferente

La moda de las motos neo retro, scramblers y que en definitiva abordan la nueva ola de motos cafe Racers que surca ahora el centro de nuestras ciudades de una forma u otra ha tenido reflejo en Husqvarna de la mano de la familia Vitpilen y Svartpilen que, desde dos cilindradas diferentes, las Husqvarna Vitpilen y Svartpilen 401 y las 701, tratan desde una carismática perspectiva esta nueva corriente, con un estilo vanguardista y totalmente diferente a lo que nos encontramos ene l mercado. Hoy nos ponemos tras el manillar de la Husqvarna Svartpilen 701 para conocer todos los detalles de esta peculiar forma de tratar el segmento de las motos scrambler, hoy ponemos a prueba a la Husqvarna Svartpilen 701.

La Husqvarna Svartpilen 701 aborda el segmento de las scrambler desde una perspectiva muy original

Prueba Husqvarna Svartpilen 30

Heredera del chasis y el motor de la KTM 690 Duke, esta moto, la Husqvarna Svartpilen 701, nos propone una estética muy llamativa y futurista que se abraza a la vocación deportiva y “cañera” de su apartado mecánico, con líneas propias de una película de ciencia ficción y una interesante reinterpretación de detalles propios de las motos de flat track.

El músculo de su depósito se une a un asiento alto rematado con una protuberancia que parece querer ser un alerón tipo ducktail y un bonito dorsal lateral que discurre por el mismo lado por el que sube su sistema de escape mientras que al frente al protagonismo recae sobre el carenado del faro y la propia óptica, simulando la típica careta de motocross o flat track.

Casi todo está acabado en negro o gris, una oscura presencia que sólo rompen unas pequeñas pinceladas en un color bronce. La combinación, el uso de los colores, es exquisito, muy cuidado y la moto desprende un aura de sofisticación estética que hará que no pase desapercibida en los semáforos o al aparcarla y recibas de forma frecuente miradas y preguntas, con un recurrente, “¿qué moto es esa?”.

Prueba Husqvarna Svartpilen 19

Este atractivo diseño está confeccionado a golpe de unas superficies plásticas con buen acabado y un buen ajuste generalizado aunque dos de sus principales rivales, la Ducati Scrambler y la Triumph Street Scrambler, nos ofrece un tacto más robusto.

Junto al manillar alto una instrumentación digital sencilla, con un nivel de información correcto aunque estando bajo el paraguas de KTM es lógico pedirle a la marca que equipe a la Svartpilen y Vitpilen con la instrumentación de los últimos modelos de KTM, una pantalla TFT más completa y visualmente más atractiva.

La Husqvarna Svartpilen 701 cuenta con un motor monociíndrico de 75 CV

Prueba Husqvarna Svartpilen 50

Tras esta fachada conceptual, tras esta particular forma de concebir a una scrambler, nos encontramos con un chasis tubular de acero aderezado con una horquilla invertida delantera firmada por WP completamente regulable, con 150 mm de recorrido y un monoamortiguador trasero también de WP y con el mismo recorrido, encargándose de su frenada Brembo, con un único disco delantero de 320 mm y una pinza radial de 4 pistones y un disco trasero de 240 mm mordido por una pinza flotante de un único pistón.

Para sus neumáticos Husqvarna recurre a los Pirelli MT 60 RS sobre llantas de 18 pulgadas al frente y 17 pulgadas en la parte trasera, en medidas 110/80 y 160/60 respectivamente, un neumático que emplea también la Ducati Scrambler y que sorprende por la gran polivalencia que ofrece pese al corte mixto de su dibujo, con un buena garre en asfalto mojado y la posibilidad de dar el salto fuera del asfalto con seguridad.

El motor de la Husqvarna Svartpilen 701 es un bloque monocilíndrico de 693cc, con un diámetro x carrera de 105 mm x 80 mm, refrigeración líquida y una potencia de 75 CV a 8.500 rpm, con un par de 72 Nm entregado a 6.750 rpm, asociado a una caja de cambios de 6 velocidades con un embrague antirrebote y un quickshifter de serie que nos permite bajar de marcha o subir sin tener que emplear el embrague. Su acelerador es electrónico.

Prueba Husqvarna Svartpilen 51

En conjunto la Husqvarna Svartpilen 701 coquetea con unos ligerísimos 159 kg en vacío, con un depósito de 12 litros de combustible, pero, ¿cómo se desenvuelve en movimiento esta Scrambler del futuro?

Lo primero que llama la atención al subirte a la Husqvarna Svartpilen 701 es lo alto que resulta el asiento. Situado a 835mm destaca por, en su posición más adelantada, cierta sensación de “moto de campo”. Con mi altura, 1.80m no hay problema pero sorprende porque visualmente la idea inicial que transmite es que es una moto más pequeña de lo que realmente es.

Giramos la llave, presionamos el botón de arranque y el zumbido del monocilíndrico, el traqueteo de su mecánica, se filtra por nuestro casco con un agudo toque que nos recuerda en parte, de forma algo más tenue, a una moto de campo, inserto primera, giro el acelerador y… ¡Vaya sensación de agilidad! ¡Vaya forma de acelerar!

Comportamiento de la Husqvarna Svartpilen 701

Prueba Husqvarna Svartpilen 9

Estamos ante una moto muy ligera con un gran monocilíndrico y una entrega agresiva, de mandos algo toscos en su tacto, sobre todo el del cambio, aunque de accionamiento preciso, permitiéndonos a golpe de acelerador y embrague modular una entrega que puede ser dócil si así lo deseamos o, como mencionaba, contundente y agresiva, con vocación deportiva.

Según voy sumando kilómetros mi percepción sobre la moto va tornándose y de referirme a ella como una scrambler diferente paso a pensar en que tiene más de Streetfighter, aunque una Streetfighter dispuesta a llenarse de barro.

La posición de conducción de moto de campo se suma a una constitución delgada, estrecha, lo que a su vez, reforzado por su bajo peso y el manillar alto, nos deja con una gran moto para movernos por ciudad, ágil entre el tráfico y con la que resulta fácil colarnos entre los coches para llegar a la pole en los semáforos.

Prueba Husqvarna Svartpilen 5

Si así lo queremos la respuesta del acelerador es contundente, con bien de par, con las revoluciones subiendo rápido, pidiéndote guerra y con un comportamiento adictivo, querrás más y más y más, se levantará enérgica, verás el “chivato” del control de tracción parpadear y este enérgico motor llega además bien correspondido por un chasis que se siente firme en el paso por curva, con unas suspensiones con un buen aplomo, con talante deportivo, comunicativo.

El tacto del acelerador también me ha parecido muy agradable, bien modulable

Se siente una moto muy compacta y parece más potente de lo que realmente es y en curva nos permite “tirarla” con una gran sensación de suavidad

Prueba Husqvarna Svartpilen 16

El conjunto está cargado de personalidad, como su diseño y la principal pega la encontraremos en las vibraciones a cierta velocidad (a unos 120 km/h se dificulta la visión por los retrovisores), en ese tacto algo tosco del cambio (sobre todo en las primeras marchas) o en el bloque a la hora de abrir gas y en el asiento algo duro, además, por desarrollos, la moto te pedirá puntualmente bajar una o dos marchas para aprovechar todo su potencial. ¿Su consumo? Estuvo alrededor de los 5 l/100 km durante los días de prueba.

¿El resultado de semejante combinación? Una moto divertida, deportiva que dentro de su comportamiento “radical” transmite confianza, muy muy ligera y ágil y sobre todo, por encima de todo, dejándote claro en cada kilómetro que estás ante una moto diferente, cargada de personalidad.

Precio y rivales de la Husqvarna Svartpilen 701

Prueba Husqvarna Svartpilen 52

El precio de la Husqvarna Svartpilen 701 es de 9.999 euros, el mismo precio que la Vitpilen 701. Si lo ponemos en contexto con sus principales rivales nos encontramos con un precio de 8.990 euros para la Ducati Scrambler Icon, 10.800 euros si acudimos a la versión Full Throttle más equiparable o bien 10.800 euros si acudimos a la Triumph Street Scrambler.

Frente a estos dos modelos la Svartpilen destaca, más allá de por su diseño, por el corte deportivo de su comportamiento y su bajo peso, convirtiéndose en la opción más radical del trio. La Ducati destaca por equilibrada y la Triumph por ofrecernos un comportamiento más rutero, más cómodo, con un tamaño más grande y un acabado premium muy bueno de sus componentes.

Cargando...