El primer SUV coupé de Audi ya está aquí. La marca de Ingolstadt se ha tomado su tiempo para crear un rival a la altura de BMW X6 y Mercedes GLE Coupé, pero la espera ha llegado a su fin con el Audi Q8, un nuevo SUV que se posiciona por encima del Audi Q7 y que pretende convertirse en la referencia de los grandes SUV premium en clave deportiva, una apuesta con la que incluso se atreve a desafiar a coches como el Porsche Cayenne o el Maserati Levante. Ya lo hemos probado, por lo que a qué esperas para conocer nuestras impresiones del Audi Q8 en vídeo.
Audi Q8 ¿Rediseño del Q7 o hay algo más?
Hay bastante más. El Audi Q8 ha marcado las distancias con el Audi Q7 en el grueso de aspectos para dejar claro que se trata no sólo de un coche nuevo sino de un enfoque claramente diferente. Su diseño exterior es el punto que más subraya este cambio, con una imagen renovada que se caracteriza por la presencia de líneas muy marcadas y una estética mucho más musculosa. A destacar el diseño de su gran parrilla frontal o los marcados pasos de rueda encargados de cobijar llantas de hasta 22”. Pero es en la zaga donde obviamente más diferenciación encontramos, con una caída más pronunciada del techo y un diseño del portón muy horizontal para enfatizar esa imagen de mayor anchura. Las ópticas LED no hacen sino subrayar esos casi 2 metros de anchura, una firma lumínica heredada del nuevo Audi A7 Sportback.
En el interior nos encontramos con un diseño igualmente diferenciado con respecto al Audi Q7, especialmente en la configuración de su salpicadero donde se instala de serie la interfaz de triple pantalla estrenada por los nuevos Audi A8, A7 y A6. Esta configuración supone un despliegue tecnológico de primer nivel, haciendo no sólo que el Audi Q8 destaque, sino que supere a todos sus competidores con bastante margen. Pero si hemos de poner un pero es que el Audi Q8 pierde personalidad de puertas hacia dentro, es decir, lo llamativo y arriesgado de su diseño exterior no se traslada al interior. Hablamos de un interior de mucha calidad, lujo y tecnología, pero demasiado parecido al resto de modelos de la marca que ya integran esta interfaz.
Audi Q8 50 TDI 286 CV: el único motor disponible
En el momento de su lanzamiento el Audi Q8 solo está disponible en versión 50 TDI. Esta denominación significa que estamos ante un motor 3.0 V6 TDI de 286 CV, un motor que acaba de ser renovado por completo para convertirse en semihíbrido gracias a una arquitectura de 48 voltios capaz de regenerar energía y asistir al motor principal. Gracias a su condición de semihíbrido el Audi Q8 consigue la etiqueta ECO, lo cual supone un importante añadido en ventajas para la circulación. A nivel técnico este motor V6 está asociado a un cambio automático de 8 relaciones por convertidor de par y el sistema de tracción total quattro. La gestión de toda la planta se realiza a través del Drive Select, un asistente con hasta 7 programas de conducción diferentes que afectan a todos los parámetros relacionados con la conducción: respuesta de motor y cambio, dirección, suspensión, asistentes, etc.
Tras realizar una larga ruta por carreteras secundarias y zonas de montaña bastante reviradas e incluso aventurarnos en un carril de tierra y grava para evaluar sus modos “Allroad” y “Offroad”, no me cabe la menor duda de que este motor 50 TDI es posiblemente el motor ideal para el Q8. Y hablo de ideal por su gran equilibrio entre consumos y prestaciones, consiguiendo bajar de los 10 l/100 Km en estas condiciones y moviendo con gran soltura al Q8 en todos los escenarios.
Cómo de deportivo es el Audi Q8
Posiblemente el punto más importante a la hora de hablar del nuevo Q8 es su comportamiento dinámico. Hablar de un SUV coupé lleva implícito un carácter más deportivo, algo que efectívamente sí consigue el nuevo Q8, sin embargo no estamos ante un coche que podamos situarlo al mismo nivel de, por ejemplo, Porsche Cayenne o Maserati Levante, coches de carácter y reacciones mucho más deportivas. La puesta a punto del Audi Q8 sorprende más por su agilidad o su mayor estabilidad que por unas reacciones verdaderamente deportivas, un cambio que le permite diferenciarse del Audi Q7 pero que no implica una pérdida de confort, polivalencia o aislamiento. El Q8 ha ido un paso más allá del Q7 pero sin correr riesgos. Habrá que esperar al Audi SQ8 para ver el lado más radical de este SUV coupé.
Las unidades que pudimos conducir durante esta toma de contacto en Alicante instalaban además los equipamientos opcionales de eje trasero direccional, estabilizadoras activas y suspensión neumática deportiva (existe una suspensión neumática no deportiva también opcional). Con esta configuración de chasis el Audi Q8 se mueve con bastante agilidad en todo tipo de carreteras, algo que sorprende por el peso del conjunto rozando las 2,3 toneladas y una longitud de 4,99 metros. El único punto que nos habría gustado encontrar más trabajado en el Q8 es la dirección, pecando de un exceso de asistencia que provoca una pérdida de feedback que en conducción deportiva se echa de menos. Comparado de forma directa frente a los BMW X6 y Mercedes GLE Coupé, el Audi Q8 se acomoda en una estudiada posición intermedia, buscando el equilibrio entre deportividad y confort.
Precio y equipamiento del Audi Q8
El Audi Q8 ya está disponible en el mercado con un precio desde 84.840 euros. Este precio está fijado para la versión 50 TDI que hemos analizado en esta prueba. En 2019 llegará un propulsor 45 TDI de 241 CV que se convertirá en el acceso de gama, también una versión 55 TFSI con motor 3.0 V6 gasolina de 340 CV. Todos los motores del Q8 incluirán de serie la tecnología mild-hybrid de 48 voltios, la tracción total quattro y el cambio automático.
Dado el posicionamiento del Q8 nos encontramos con uno de los modelos más avanzados de la gama Audi, tanto es así que a su llegada al mercado se convierte en el indiscutible rival a batir de su segmento. Audi no ha escatimado en posibilidades de equipamiento destacando las soluciones de infoentretenimiento, los asistentes a la conducción y las muchas fórmulas para mejorar el confort a bordo. Pero no podemos olvidar que aunque el nuevo Q8 integrará de serie la espectacular interfaz de triple pantalla o el portón trasero eléctrico, como es habitual en los fabricantes premium para disfrutar de todas las posibilidades y tecnologías de este SUV nos veremos obligados a viajar por un extenso catálogo de extras que pueden elevar el precio del Audi Q8 muy por encima de su tarifa inicial. Frente al Q7, el Audi Q8 tendrá un sobrecoste superior a los 15.000 euros para configuraciones de motor y equipamiento similares.
Audi Q8 
