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Hablemos del Red Bull X2010: el Aston Martin Valkyrie no es la primera nave espacial de Newey...

Aston Martin nos ha sorprendido, de la mano de Red Bull y bajo la batuta de Adrian Newey, con un espectacular hiperdeportivo que parece sacado del futuro, que luce más como una nave espacial que como un coche deportivo, esculpido por la aerodinámica, con el ahorro de peso muy presente… como si un LMP1 o un Fórmula 1 del futuro se tratara. Hablamos, claro, del Aston Martin Valkyrie pero… ¿sabías que esta no es la primera “nave espacial” que fabrica Adrian Newey junto a Red Bull?

Antes del Aston Martin Valkyrie Adrian Newey ya dio vida al Red Bull X2010

El Red Bull X2010 nos sorprendió en el Gran Turismo 5 (también pudimos disfrutarlo en el Gran Turismo 6) poniendo a nuestra disposición el coche de F1 ideal de Adrian Newey, una creación que al igual que el Aston Martin Valkyrie luce futurista, digno de una película de Star Wars, una especie de Fórmula 1 con las ruedas carenadas y el habitáculo cerrado, cabina que, sea dicho de paso, marca las principales diferencias en su diseño con la creación del genio de la aerodinámica para Aston Martin.

El Red Bull X2010 llegó a ser un coche real más allá del Gran Turismo 5 y 6, pero con una presencia anecdótica reservada a ciertos eventos

Este deportivo, de 4.75 metros de largo, de 2.18 metros de ancho y que no llegaba al metro de alto pesaba, en orden de marcha, 615 kg y ponía a nuestra disposición un motor V6 biturbo de 3 litros de cubicaje que desarrollaba una potencia máxima de 1.500 caballos a 15.000 rpm. Sí, has leído bien, 1.500 caballos para sólo 615 kg. Una auténtica locura. Su par era más modesto, de 714 Nm a 12.000 rpm.

Su motor era un V6 de 1.500 caballos… ¡y pesaba poco más de 600 kg en orden de marcha!

Prestacionalmente era capaz de marcar un 0 a 100 km/h de 1.4 segundos, llegando a los 200 km/h en 2.8 segundos y con una velocidad máxima de 450 km/h y además gozaba de un paso por curva espectacular gracias en gran parte a un “ventilador” situado bajo el coche, encargado de crear un efecto de succión que se traduce en una adherencia muchísimo mayor, una fórmula que ya vimos en el Chaparral 2J y en el Brabham BT46B de 1978.

Uno de los puntos más destacados del Red Bull X2010 era el efecto de succión generado a través de un ventilador

Obviamente este coche no llegó a las calles, como sí llegará el Aston Martin Valkyrie, de hecho su presencia más allá de la Play Station fue anecdótica, en algún que otro evento, pero visto lo visto, habiendo conocido ya algunos de los credenciales del Valkyrie y viendo de lo que fue capaz Adrian Newey con el Red Bull X2010

Imagen lateral y delantera del Aston Martin Valkyrie, destacando su diseño aerodinámico.

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