La cuarta generación del Skoda Fabia está a punto de ser presentada, y Skoda ha decidido revelar prácticamente toda su información oficial, a falta eso sí, de las imágenes oficiales. En verdad, las «fotos espía» de este artículo son fotos oficiales de Skoda, tomadas a modelos de preproducción camuflados. En cualquier caso, ya sabemos prácticamente todo lo que debemos saber sobre el utilitario checo. Lo más llamativo, en nuestra opinión, es que crece nada menos que 11 centímetros con respecto a su tercera generación.
Su tamaño exterior de 4,11 metros hace que sea solo 4 cm más corto que un Volkswagen Golf de cuarta generación, y lo convierte en uno de los coches más grandes del segmento B. De hecho, es varios centímetros más largo que SEAT Ibiza y Volkswagen Polo, coches con los que comparte su plataforma modular MQB-A0. Este crecimiento de sus dimensiones exteriores tiene como razón de ser una mayor amplitud a bordo – especialmente en las plazas traseras – y el que Skoda afirma será el maletero más grande del segmento: el Skoda Fabia tendrá 380 litros de volumen máximo de carga, 50 litros más que el modelo saliente.
El Skoda Fabia de cuarta generación es un coche conservador, a tenor de los últimos devenires del segmento. No es una revolución tecnológica, y desde luego no es revolucionario a nivel técnico. Pero quiere convertirse en uno de los reyes de la relación calidad-precio, y para hacerlo, cuenta con varios ases en la manga. El primero es una dotación de equipamiento más que amplia: podrá tener faros full-LED, instrumentación digital, control de crucero adaptativo con centrado en el carril, nueve airbags o un sistema de infotainment conectado a internet.
El segundo as en la manga es una gama de motores de sobra probada. Consistirá en dos 1.0 MPI atmosféricos de 65 y 80 CV, un 1.0 TSI de tres cilindros con 95 CV y 110 CV, y un 1.5 TSI de 150 CV y cuatro cilindros. Si queremos un cambio DSG de siete relaciones, solo lo podremos tener con el 1.0 TSI más potente y el 1.5 TSI – este último será el único que no podremos asociar a un cambio manual. Aunque estos motores cumplen con la normativa Euro 6D, llevan filtro de partículas y tienen el apellido «Evo», ninguno de ellos tiene hibridación ligera.
A futuro esto puede ser un problema, al menos hasta que se lance una previsible versión G-Tec alimentada por gas natural comprimido. La gama carece de versiones diésel, pero sí puede presumir de una gran eficiencia, especialmente gracias a una aerodinámica mejorada. El coeficiente aerodinámico se reduce de 0,32 a 0,28 y contará con rejillas frontales activas, para reducir su consumo a alta velocidad. Pero sin duda, en lo que el Skoda Fabia debería ser el rey es en practicidad. Simply Clever es el nombre de su verdadero as en la manga.
Estas soluciones prácticas nos facilitarán la vida a diario. Entre las novedades contamos con una toma USB-C en el retrovisor – ideada para alimentar una dash-cam, algo muy valioso en países del este – una caja plegable en el maletero, posavasos extraíbles o un portabolígrafos delante de la palanca de cambios. En total, contará con 43 soluciones Simply Clever. A falta de conocerlo a fondo, creemos que será un producto de éxito si es competitivo en precio: coches como el Dacia Sandero Stepway o los incombustibles SEAT Ibiza no se lo pondrán fácil.
Skoda Fabia 
