El Suzuki Swift siempre ha sido un coche diferente. El utilitario japonés fabricado por Suzuki va ya por su sexta generación, que se estrena más moderna, tecnológica y grande que nunca. El Suzuki Swift ha crecido algunos centímetros, al menos según indican sus primeras imágenes, de su versión destinada al mercado japonés. Hereda del Suzuki Baleno una versión híbrida y una versión con motor turbo de 1,0 litros y tres cilindros. ¿Qué más esconde el Suzuki Swift? ¿Conserva su originalidad y personalidad o se ha suavizado?
Siempre fue original. Al menos estéticamente, evoluciona favorablemente desde su actual generación, ya con más de un lustro en el mercado. No rompe con sus antepasados, haciendo gala de un diseño quizá predecible. Su frontal es la parte más dinámica del coche, con un paragolpes relativamente agresivo, una calandra de forma ovoide y dos ópticas con tecnología LED. El clásico perfil lateral del coche se mantiene intacto, con ese curioso pilar C – y ese corte de color negro, tan de moda hoy día – que tanta personalidad le da.
Su zaga no me gusta tanto. Es más anodina, y aunque conserva esas ópticas con forma de boomerang, las ha deformado con el objetivo de gustar más a todo el mundo. El Suzuki Swift sigue siendo bonito y original, pero no tanto como en pasadas generaciones. Según los primeros datos indican, y a la espera de conocer la información oficial del mercado europeo, sólo se ofrecerá en versión de cinco puertas. Más grande, con cinco puertas, y una estética más sobria, el Suzuki Swift podría canibalizar parte de las ventas del Suzuki Baleno.
En el habitáculo no hay sorpresas. Una vez más, Suzuki hace gala de diseños y soluciones estrenadas hace años en las marcas rivales. Siempre juegan sobre seguro. Su instrumentación es convencional, con una pantalla de información a color y un sistema de infoentretenimiento táctil como grandes novedades. Me gusta el diseño de su volante y sus asientos, con un toque de deportividad. Al crecer en talla, se espera que tanto su maletero como el espacio disponible en sus plazas traseras crezcan en consecuencia.
En lo tocante a sus motorizaciones tampoco hay grandes sorpresas. El Suzuki Swift hereda la gama de motores estrenada en el Suzuki Baleno. El motor de acceso será un 1.2 atmosférico de culata multiválvulas y 90 CV de potencia. Este motor también estará disponible en versión SHVS, con idéntica potencia. Es un semi-híbrido, con un motor eléctrico que asiste al motor térmico, sin poder propulsar por sí solo al vehículo. El tope de gama es un motor 1.0 BoosterJet de tres cilindros, un pequeño turbo de 111 CV de potencia.
El Suzuki Swift está disponible en el mercado japonés con cajas de cambio manuales o CVT, así como con la opción a tracción integral. En el plano tecnológico, equipará por primera vez en la historia del Swift control de crucero adaptativo, así como un sistema de frenada automática en ciudad. Tecnologías recordemos, estrenadas hace apenas unos meses en el Suzuki Baleno. Lo que ahora queda por saber es qué ocurrirá con la codiciada versión Sport, en la que todos los rumores apuntan a una posible turboalimentación.
Fuente: Carscoops
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