La presentación del nuevo Volkswagen Polo es inminente. El próximo viernes se desvelará uno de los grandes lanzamientos de este año, el nuevo Volkswagen Polo, una nueva generación del utilitario alemán, que se renueva por completo para aproximarse, como nunca antes hubiera hecho, a su hermano mayor, el Volkswagen Golf. Esa es la evolución más evidente de un producto que seguirá las pautas de su hermano español, el nuevo SEAT Ibiza, que ya ha pasado por nuestras manos. Y para amenizar la espera, Volkswagen ha creído conveniente avanzarnos las dos primeras imágenes del nuevo Volkswagen Polo, con las cuales ya nos podemos ir haciendo una ligera idea de los rasgos que adquiere el superventas de Volkswagen. Un Volkswagen Polo que pronto también recibirá un hermano crossover, el nuevo Volkswagen T-Cross.
En estas imágenes, Volkswagen concede todo el protagonismo a los faros y los pilotos traseros del nuevo Volkswagen Polo. Detalles que, sin duda, serán algunos de los rasgos más característicos de este coche.
Al respecto de su estética exterior no se esperan grandes cambios. De seguir la evolución del SEAT Ibiza, hemos de asumir que el nuevo Volkswagen Polo apenas crecerá en longitud, pero sí acogerá una distancia entre ejes mayor y, sobre todo, una plataforma más ancha. Con estas mejoras, y aprovechando la plataforma MQB-A0, una iteración de la plataforma MQB del Volkswagen Golf optimizada para vehículos del segmento B, el nuevo Volkswagen Polo debería ganar enteros en espacio interior y dinamismo en carretera.
Un Volkswagen Polo «made in Spain»
Como hasta ahora, el Volkswagen Polo seguirá fabricándose en la factoría de Volkswagen en Landaben, Navarra. Y asumimos que seguirá siendo el modelo más fabricado y exportado en España, como hasta ahora, siendo también uno de los productos más vendidos en Europa.
Como curiosidad, en 2016 se produjeron cerca de 300.000 unidades del Volkswagen Polo en Landaben, de las cuales un 91,6% fueron destinadas a exportaciones.
Volkswagen Polo 
