El triste destino de un Mercedes CL 55 AMG
Muchas veces tendemos a personalizar los coches, no en el sentido de customizarlos, sino de darles atributos humanos. Ninguna otra máquina es capaz de hacernos sentir lo que vivimos conduciendo un coche. Son tantas cosas que desprendernos de nuestros antiguos coches da mucha pena, en el mismo sentido que cuando vemos nuestro coche nuevo por primera vez casi volvemos a la infancia. Pero son sólo máquinas, me dicen. Son máqu