Además del precio o de la autonomía real, el tiempo que se necesita habitualmente para recargar la batería de un coche eléctrico es, todavía, un gran inconveniente para sus usuarios y un lastre para su popularización. En la inmensa mayoría de casos, pasar del 10% al 80% es una operación que lleva, como poco (empleando un cargador de alta potencia), cerca de media hora. Sin embargo, parece ser que el nuevo y mayor logro en movilidad eléctrica hasta la fecha viene, una vez más, desde China: la última batería del fabricante...