Tiene menor tamaño que el Mazda MX-5 y un peso que no llega ni a los 800 kg, un deportivo de estética retro al que parece que le falta algo
Pocos coches hay a la venta en Europa, por no decir prácticamente ninguno, que mantengan un enfoque y una filosofía tan puristas como los del Mazda MX-5. Con Lotus habiendo abandonado la fórmula de la ligereza (el Emira pesa 1.400 kilos), el pequeño japonés reside en una categoría compuesta por él mismo, únicamente, aunque hay otro pequeño segmento, o nicho, más bien, en el que militan un par de modelos del todo atípicos. Hablamos d