El Fiat 500 es el pequeño vehículo urbano fabricado por Fiat. El Fiat 500 moderno rememora el auténtico 500, un clásico que pobló las calles de numerosos países entre los años 1957 y 1975. Cinquino en Italia o Fitito en Argentina, era un pequeño mini de tres puertas con estilo italiano con una potencia inicial de 15 CV. Aquel modelo formó parte incluso de grandes competiciones y preparaciones. El Fiat 500 deja atrás gran parte de las incomodidades pero mantiene la esencia urbanita del original, incluyendo versiones híbridas y eléctricas del mismo a su catálogo y aportando una buena dosis de personalidad al mercado en el que compite. El Fiat 500 es un pequeño utilitario de tres puertas de 3,57 metros de largo, 1,62 de ancho y 1,48 de alto.

Por medidas y por precio el que más se aproxima es el Renault Twingo, y por nivel de personalización dentro de su segmento destaca el Opel Adam. Otras alternativas similares son los Hyundai i10, Seat Mii, Citroën C1 o KIA Picanto, aunque realmente el Fiat 500 no tiene un rival directo que le iguale en diseño, personalidad y calidad. Comparado con el MINI de 3 puertas es 17 centímetros más corto, seis centímetros más estrecho y ocho centímetros más alto. Si estás pensando comprar un coche utilitario pequeño para ciudad, no te pierdas nuestra guía de compra con todas las alternativas del mercado.

El Fiat 500 no tiene realmente un rival directo: por diseño, carácter y personalidad está un escalón por encima del resto de modelos de su tamaño

Diseño exterior del Fiat 500

El Fiat 500 está disponible exclusivamente con carrocería de tres puertas, con motores gasolina y diésel de entre 69 y 105 CV y con varios niveles de equipamiento, siendo el 500 S el más alto de la gama (si no tenemos en cuenta los acabados exclusivos como el 500 Riva). En Diariomotor hemos probado varias versiones del Fiat 500; la más representativa es la correspondiente al modelo renovado, la prueba del Fiat 500 2016.

El Fiat 500 está disponible exclusivamente con carrocería de tres puertas, con techo cerrado o cabrio. Hay varios motores gasolina y diésel y las posibilidades de personalización son muy numerosas

Está homologado para cuatro plazas, y a pesar de su tamaño sorprende el espacio en las plazas traseras -dentro de lo que puede sorprender el espacio en un coche de 3,57 metros- y lo cómodo que resulta acceder a ellas. Por contra, el maletero de 185 litros resulta algo pequeño (ver impresiones de plazas traseras y maletero).

En ciudad el Fiat 500 es cómodo de manejar gracias a sus reducidas dimensiones y una la dirección asistida con función “City” para aparcar, que la hacer ser más blanda y, así, más cómodo la maniobra de aparcamiento. Aún así, todas las versiones del Fiat 500 tienen un defecto: un radio de giro demasiado amplio para las medidas que tiene el coche.

Fiat 500 C: toda la personalidad del 500, a cielo abierto

El 500 se comercializa solamente con carrocería de 3 puertas pero en dos variantes distintas: la normal de techo cerrado y el 500 C, con techo escamoteable. Así, se puede disfrutar del pequeño urbanita a cielo abierto.

Dinámicamente, el Fiat 500 transmite sensación de solidez. La suspensión es firme pero no llega a ser incómodo

Dinámicamente apenas hay diferencias entre el Fiat 500 y su versión Cabrio. En cualquier caso, el 500 da buena sensación de solidez, no hay crujidos estructurales; la suspensión es firme y los baches llegan al interior de forma algo seca. A pesar de ello, no puede decirse que sea un coche incómodo. Su comportamiento en curva es más bien subvirador pero muy plano y controlado, con lo que transmite tranquilidad el volante.

Diseño interior del Fiat 500

Desde el nivel de equipamiento más básico (Pop) lleva siete airbags, climatizador manual, UConnect Radio con seis altavoces, puerto USB, mandos en el volante y luces diurnas LED. El acabado Lounge añade el techo panorámico de cristal, llantas de aleación de 16”, la versión Uconnect Radio LIVE con pantalla táctil de 5 pulgadas, climatizador automático y el volante de piel con mandos multifunción.

Desde el acabado más básico incluye siete airbags, climatizador manual y UConnect Radio con seis altavoces y USB

El 500 S tiene una pantalla mayor (7 pulgadas) y añade elementos estéticos exclusivos de esta versión. Además, cabe mencionar el amplio abanico de personalización con el que se puede configurar el Fiat 500.

Además del Fiat 500 existe una versión más larga y alta denominada Fiat 500L, de cuatro puertas, y una tipo SUV: el Fiat 500X. Las versiones más deportivas se comercializan bajo la marca Abarth, como el Abarth 595. En Diariomotor hemos probado, entre otros, el Abarth 595 Competizione con 180 CV para poco más de una tonelada.

Motores del Fiat 500

En el apartado de los propulsores gasolina, hay disponibles un 1.2 de 69 CV y el 0.9 TwinAir con 105 CV de potencia, un propulsor bicilíndrico con sistema Start&Stop de serie que homologa un consumo de combustible de 4,8 l/100 km. A pesar de la buena cifra, el más ahorrador es el 1.3 Multijet diésel de 95 CV, que homologa 3,4 litros cada cien kilómetros.

Fiat 500 eléctrico

Tras más de una década por nuestras carreteras, el Fiat 500 moderno daba un paso más hacia su decisión de mantenerse vigente con el paso del tiempo y el avance las tecnologías, algo que otros grandes estandartes del Siglo XX no podían decir. De esta forma, en 2020 se anunciaba la creación de un Fiat 500 de nuevo cuño, con la característica principal en este caso de ser completamente eléctrico. Se buscaba actualizar de esta forma la mecánica de un coche centrado a los desplazamientos urbanos y con ese toque retro/futurista por el que también optaban otras firmas.

La estética se mantenía prácticamente con esa filosofía inicial. Formas redondeadas, coquetas y puras, aprovechando que al ser 100% eléctrico se podía optar por prescindir de algunas obligaciones de diseño que se encuentran asociadas a las mecánicas de combustión interna. Seis centímetros más largo y seis centímetros más ancho que su homologo térmico, se presentaba con la posibilidad de ser adquirido con carrocerías distintas: una tres puertas y un descapotable de cuatro plazas con una suerte de techo de lona retráctil con pilares y montante superior fijos.

La gran novedad está obviamente en el interior del Fiat 500. Se estrena una plataforma que está protagonizada por un motor eléctrico de 87 kW (algo menos de 120 CV de potencia), alimentado por un pack de baterías de 42 kWh con el que podrá recorrer hasta 320 kilómetros con una carga completa (según cifras teóricas, de homologación, bajo ciclo WLTP). Alcanza los 150 km/h y su aceleración de 0 a 100 km/h es de 9.0 segundos.

En cuanto a la recarga, la marca apunta a que se podrán emplear sistemas de carga rápida de hasta 85 kW, lo que lo permite completar un 80% de la carga en apenas 35 minutos. De serie incluye un cargador doméstico Easy Wallbox de 3 kW, que puede adaptarse para trabajar a 7,4 kW. En cuanto al habitáculo, corte modernista, protagonizado por una pantalla de 10,25", con un sistema de infoentretenimiento de última generación (UConnect 5) y compatibilidad Android Auto y Apple Carplay inalámbrico. Entre sus principales rivales se encuentran el Honda e y el MINI eléctrico.

Fiat 500 Hybrid

Solo unos meses antes de presentar su propuesta 100% eléctrica, el Fiat 500 presentaba su variante con tren motriz híbrido, bautizado simplemente como Fiat 500 Hybrid y llamado a ser un vehículo que no solo sirva para un entorno urbano, sino que también sea capaz de dar la talla en viajes gracias a su motor tricilíndrico es un nuevo bloque 1.0 atmosférico de inyección directa, perteneciente a la familia Firefly, asociado a un sistema microhíbrido de 12V. El esquema empleado es el ya habitual, con un conjunto motor-generador eléctrico que hace las veces de impulsor, de motor de arranque y de recuperador de energía. El conjunto estrena además una caja de cambios manual de 6 velocidades.

En cuanto a la estética, no hay cambios tan evidentes como los del Fiat 500 eléctrico, optando el Fiat 500 Hybrid por presentar un tono para la carrocería y para la iluminación ambiente del interior en color azul, sumándose a la forma con la que la mayoría de los fabricantes distinguen a sus modelos híbridos del resto de su gama. Los datos oficiales revelan que consume hasta un 20 y un 30% menos que un Fiat 500 1.2, siendo además uno de los que optan a la distinción administrativa de la etiqueta ECO de la DGT.