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Materiales inteligentes que ahorran peso en el nuevo Chevrolet Corvette Stingray

General Motors ha dado un salto cualitativo muy importante con el nuevo Chevrolet Corvette Stingray. Para muchos se trata de una ruptura con el concepto clásico en ciertos aspectos, aunque para muchos otros se trata de una de las mejores evoluciones sufridas en la historia del Vette a nivel técnico. La eficiencia ha marcado el desarrollo de esta nueva generación, y el uso de materiales ligeros y soluciones inteligentes ha servido para reducir el peso en hasta 90 kilogramos.

El Aluminio es el principal protagonista del nuevo Chevrolet Corvette Stingray junto al uso de polímeros reforzados con fibra de carbono y fibra de vidrio, sin embargo, General Motors destaca otras soluciones que ha permitido reducir al máximo el peso como son los denominados materiales inteligentes. Se trata de una solución técnica que busca el reemplazo de ciertos elementos que por su funcionamiento necesitan de un peso extra en sistemas eléctricos.

Materiales y fibras, la eficiencia en el vehículo del futuro

El nuevo Corvette emplea esta aleación de Níquel-Aluminio-Cobre o Titanio-níquel en las trampillas que gobiernan la salida de aire interior por detrás de la ubicación del maletero. Normalmente, los sistemas de ventilación gobiernan la canalización del flujo de aire a través de una ventilación inducida que finalmente es expulsada a través de un conjunto de trampillas motorizadas ubicadas en la zona posterior.

Un material con memoria capaz de variar sus características mediante aporte de calor, electricidad, exposición a un campo magnético…

Estos sistemas por separado no presentan un lastre demasiado significativo, pero el nuevo Corvette instala alrededor de 200 sistemas motorizados similares, lo cual sí supone un aporte de peso muy condicionante a la hora de definir un deportivo que debe mejorar en cifras de eficiencia.

Con este objetivo puesto en el punto de mira, los ingenieros de General Motors recurrieron al empleo de aleaciones que pudieran modificar ciertos aspectos en sus características a través del intercambio térmico, la exposición a un campo magnético o el paso de corriente a través de ellos. Se trata de conseguir un material que siendo activado a través de una determinada fuente de energía, modifique sus propiedades cumpliendo de igual modo que lo haría un compartimento de ventilación convencional accionado por motorizaciones eléctricas. GM confirma una reducción del peso de 0,5 kilogramos respecto al sistema al que reemplaza.

Fuente: GreenCarCongress
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