El Mundial de Fórmula 1 disputa este fin de semana su cuarto Gran Premio de esta temporada 2022 con la novedad de que será el primer fin de semana de esta nueva era técnica con las carreras con formato al Sprint. La FIA anunció hace algunos meses su decisión de nominar a Interlagos, Red Bull Ring y el Autódromo Enzo e Dino Ferrari como las tres pistas en las que se iba a implementar, teniendo en cuenta que prácticamente todos los promotores del calendario les habían solicitado esto para sus respectivos eventos. Lo que parece claro es que la Federación ha optado por circuitos cortos con el objetivo de que la acción se mantenga compactada durante la jornada del sábado y así aumentar la emoción durante las tres jornadas.
Este “F1 Sprint” que ha denominado Liberty Media tendrá novedades en 2022, aunque debemos recordar que la estructura del fin de semana se mantiene tal y como la conocíamos, con un viernes que contará con una sesión de entrenamientos libres, seguida en este caso por la clasificación, la cual determinará el Poleman y la parrilla de salida de la carrera del sábado, la cual se disputará después de los FP2, también programado a apenas 60 minutos de acción en pista.
La carrera al Sprint mantiene su duración, en torno a unos 100 kilómetros, lo que en Imola se traduce en apenas 21 giros, lo que debería depararnos una carrera de entre 25 y 30 minutos. El otro gran cambio además de otorgar el status del poleman al más rápido a una vuelta el viernes y no al ganador del sábado, será el hecho de que este año los ocho primeros en la carrera corta se llevarán puntos, algo que en 2021 apenas se limitaba a los ocupantes del podio.
De esta forma, esta campaña el montante máximo que puede optar un piloto en fin de semana de Sprint Race será de 34 puntos, siempre y cuando consiga los ocho puntos del ganador del sábado, además de los 25 puntos el domingo y el extra por la vuelta rápida.
El formato al Sprint será un reto mayor en Imola:
Si cabe esta temporada el reto parece ser incluso mayor. Si hacemos caso a las previsiones meteorológicas, el viernes parece irremediable la presencia de la lluvia, algo que sin duda alterará el desarrollo normal y que pondrá contra las cuerdas tanto a los pilotos como a los ingenieros. Por si fuera poco reto el seguir descubriendo los nuevos monoplazas en un circuito tan distinto a los que nos encontramos en Albert Park, Sakhir y Jeddah, también se debe sumar que con apenas 60 minutos de entrenamientos, los competidores deberán elegir la configuración con la que saldrán a clasificación.
El denominado como Parc Fermé no ayudará sin lugar a duda a ejercer esa presión extra a la hora de encontrar esas especificaciones compromiso para un fin de semana que puede tener un viernes pasado por agua, mientras que el sábado especialmente se mantiene con la incertidumbre de si podrá completarse en seco. Debemos recordar que la normativa de la FIA permite algunos cambios antes de la FP2 del sábado, pero son modificaciones muy limitadas y el régimen de parque cerrado regresará antes de la Sprint Race y se mantendrá de nuevo hasta el domingo, únicamente permitiendo la sustitución de los elementos dañados por otros de las mismas características y homologación.
